Brasil apagó a Ecuador
Estancias > Primera planaPor Marsares
viernes 15 de julio de 2011 17:39 COT
Lo que se quería de Brasil se dio en este partido contra Ecuador. Ganó con suficiencia a un equipo aguerrido que quiso jugarle de igual a igual, pero que al final tuvo que hincar la rodilla ante el contundente embate de las nuevas figuras de la canarinha, llamadas a reverdecer laureles y afincar esperanzas.
Lo importante no es que le digan a uno que es el rey del mundo sino que se lo crea y actúe como tal. El Brasil de Dunga, automatizado, funcionaba dentro de su esquema mientras todo marchara de acuerdo con el libreto, pero a la menor dificultad, el andamiaje se iba al piso.
Lo importante del que ahora talla Menezes es que comienzan a creerse el cuento y no se arredran ante las dificultades. No fue fácil su comienzo en esta Copa, contra una Venezuela que quería graduarse de actor de reparto, abandonando el papel del extra a quien todos se creen con derecho de zarandear.
Tampoco le fue nada bien con Paraguay, pero pasó algo importante. Jugaron con corazón, aunque a veces se perdieran en el campo, o cometieran errores como el de Dani Alves, que le dio el pasaporte al segundo gol de los guaraníes. Empataron y les supo a gloria, más que por el resultado, porque se demostraron a sí mismos que podían.
Menezes ajustó el equipo y con Maicon en vez de Alves abriendo camino por la punta derecha, Brasil ganó en fluidez. El rompimiento del medio campo que dejó en ayunas a sus aplicados rompe-redes, se remedió. Al talento intermitente de Ganso, se unieron las excursiones de Maicon, para que Pato y Neymar hicieran la tarea.
Pero no pasó en la primera media hora. Si no estuvieran jugando su clasificación casi que podría decirse que su actitud era displicente. Mientras Ecuador lo intentaba controlando el balón, Brasil paseaba por la gramilla, con Neymar y Pato perdidos en el espacio.
La película dio un giro gracias a Lucas Leyva que abre la cancha. André Santos lo aprovecha y le sirve el balón a Pato que se va en diagonal rumbo a la portería de Marcelo Elizaga. El cabezazo abre la cuenta y de paso sacude la modorra reinante.
La desazón invade a Ecuador y su andar se torna cansino, salvo por Caicedo, que sin Dios ni ley, con patente de corso, invade la selva brasileña y con un disparo que lleva mantequilla en el cuero, filtra el balón por entre la humanidad de Julio César.
Empate inesperado, un minuto después del palazo de Robinho que a los 36, estuvo por aumentar el marcador. Igual infortunio para los pupilos de Rueda que, al término del primer tiempo tuvieron el triunfo parcial en los botines de Arroyo, pero una intervención afortunada de Julio César marra la anotación.
Llegados del vestuario, los brasileños se fueron encima de Ecuador en procura de ponerse en ventaja. Ganso vuelve por sus fueros y con la precisión de un cirujano, sirve a Neymar para que la meta en la red. Pero Ecuador responde con una nueva incursión de Caicedo que por segunda ocasión bate a Julio Cesar.
El nuevo empate estruja el orgullo de Brasil y Neymar de nuevo prueba a Elizaga con un misil que apenas puede rechazar de mala manera, dándole a Pato la oportunidad de firmar el tercer tanto que retorna a Brasil a la cumbre. El cuarto llega de la mano del propio Neymar, oportunidad iniciada por Maicon, arrollando por tierra derecha.
Crece Brasil con el correr de los partidos. Y aunque las florituras se llevan en los genes, se administran con mesura y a la par se desconfía de las genialidades que siempre llevaron envueltas en sus guayos los que encumbraron a la auriverde al siguiente universo.
Hay buenos jugadores, la cantera no se agota, pero los demás sudamericanos ya no les piden autógrafos; los exigen para ellos mismos pues en todos lados se cuecen buenos jugadores, aunque los brasileños cargan con el fardo de la historia, y se les exige más que a cualquiera.
La técnica, que antes se daba silvestre, ahora se gesta en los laboratorios y aunque hoy Brasil reniegue de Dunga, su trabajo sigue presente en el Brasil de Menezes, planeando con lupa cada partido, ajedrez que no deja espacios en la cancha sin oficio.
Paraguay lo espera para reafirmar lo hecho o descocer el tejido.
Alineaciones
Brasil: Julio César; Maicon, Lucio, Thiago Silva, André Santos; Ramires, Lucas Leiva, Ganso(m.76, Elías); Robinho, Neymar (m.79, Lucas) y Pato (m.85, Fred).
Ecuador: Elizaga; Reasco (m.81, Achilier), Araujo, Erazo, Ayoví; Minda, Noboa (m.90, Montaño), Arroyo; Méndez (m.76, Mina); Benítez y Felipe Caicedo.
Goles: Pato (m.28). Caicedo (m.37). Neymar (m.49). Caicedo (m.59). Pato (m.61). Neymar (m.72) .
Árbitro: Roberto Silvera (URU). Amonestó a Noboa y André Santos.
Partido del Grupo B de la Copa América de fútbol disputado en el estadio Mario Alberto Kempes, de la ciudad argentina de Córdoba, ante unos 25.000 espectadores.
Recursos relacionados