Fútbol de “verano”
Columnas > Con los taches arribaPor Rafa XIII
viernes 12 de enero de 2007 10:18 COT
En esta insoportable época del año en la que las revistas y los periódicos vienen flacos, los almacenes sacan en rebaja lo que no pudieron vender en diciembre, la televisión sigue rellenado con programas “clásicos” de hace 16 años, mientras nos amenazan con más realities chimbos, y en donde, para colmo de males, no hay campeonato de fútbol profesional en Colombia, es más que justo decir que los torneos amistosos son una bendición.
Dicen que esta es una temporada “de verano”, aunque por estos lares no hay estaciones. En la zona andina se producen unos días con soles caniculares, combinados con noches y madrugadas con heladas bajo cero y neblinas dignas de Londres. Y en las costas, los ventarrones, las ráfagas de calor y los mares de leva son el común denominador. En este “verano”, visionarios hombres vinculados al fútbol tuvieron la maravillosa idea de aprovechar el interín del balompié rentado para disputar campeonatos que al menos en teoría son amistosos, como el Octagonal del Tabora, el Hexagonal del Norte (en Usaquén), el del Suroriente, el Hexagonal de la Cancha Marte (en Bucaramanga) y demás eventos, que desde siempre han estado a la sombra del más famoso de todos: el Hexagonal del barrio Olaya Herrera, al sur de Bogotá.
Este campeonato, que curiosamente comenzó a jugarse el mismo año en el que nació la Copa Libertadores de América, en 1960, ha sido un gran escenario de debut de incontables figuras que a la postre se consagraron en el profesionalismo, e incluso La Equidad, nuevo integrante de la división de honor de nuestro fútbol, ha sido protagonista de vieja data y hasta campeón en dicho certamen. Al lado de los verdirrayados de la compañía de seguros que lleva su nombre, han pasado por el pequeño estadio de la Primero de Mayo con 24, equipos de renombradas escuelas de fútbol como Maracaneiros, de empresas como Caterpillar Motor y Nacional de Eléctricos, y en otras ediciones, los representativos de Montaña y Fandiño, y Apuestas Monserrate, amén de los aguerridos oncenos de los barrios Centenario y Olaya, que al menos en el papel, serían más locales que cualquier otro.
Del tierrero en el que se jugaba en los años 60 y 70, queda solamente el recuerdo. El gramado del Olaya, a pesar de los helados amaneceres y los infernales calores de diciembre y enero, se mantiene en una buena condición. Desde hace un par de décadas se ha vuelto costumbre que los encuentros se televisen por algún canal de alcance mediano, como en la difunta Cadena 3 o en Señal Colombia, y en nuestros días en Canal Capital o para los abonados de Cablecentro. Las emisoras locales también le dedican al hexagonal, las mañanas y tardes de los domingos, con un despliegue muy similar al del fútbol grande.
Abro el paréntesis. El tiempo ha vuelto frase de cajón aquello de que “el próximo año el Olaya tendrá una nueva cara”. Ha hecho carrera la promesa de que “ahora sí” van a cambiar la posición de la cancha, de modo que los arcos no queden de oriente a occidente, sino de norte a sur, para que a los guardametas no les pegue el sol de frente; igualmente, nos han dicho muchas veces que van a construir todas las tribunas en concreto, para aumentar su capacidad y sobre todo la seguridad de los espectadores.
Esto último, de realizarse alguna vez, convertiría al Olaya en un verdadero escenario alterno para El Campín. Sucede ahora que con el proceso de remodelación del estadio de la 57, no hay opciones para que los equipos capitalinos jueguen de local, porque el de Techo es muy pequeño e inadecuado para partidos de alto riesgo como los clásicos y aquellos en los que actúen América y Nacional, que movilizan grandes cantidades de hinchas. La Equidad anuncia que actuará en el Alfonso López de la Universidad Nacional, que aunque más cómodo que Techo, tampoco brindaría garantías suficientes de seguridad para encuentros de alto riesgo, por el tema del ingreso de la fuerza pública a las instalaciones universitarias. Cierro el paréntesis.
Un elemento que le agrega un sabor distinto al fútbol del Olaya es el ambiente que rodea a los tres partidos de cada jornada. Puede que El Campín tenga su Palacio del Colesterol, pero el Olaya, con sus casetas de fritanga exhibida sobre hojas de plátano, no tiene nada que envidiarle, además de los vendedores de chuzos (pinchos), de arepas, de algodón con azúcar, los paleteros y hasta los pregoneros de los centros médicos de los alrededores, que a lo mejor no pierden la esperanza de que unos cuantos hinchas se indigesten con tanto chicharrón, bofe y jeta, y terminen utilizando sus servicios de urgencias.
En instancias definitivas, el lleno que se presenta en el Olaya se convierte en la envidia de muchas aficiones del fútbol profesional, en cuyos estadios hay más policías y vendedores que hinchas. La gente se sube hasta en los árboles, para presenciar una definición por penales, como la del torneo 2001-2002, o un partido extra para definir el campeón, como en la edición anterior. Y lo mejor de todo es que, gane el que gane, todo el mundo se va para su casa tranquilo con su familia, sabiendo que si bien no vio un partido de la Liga Premier inglesa, pasó un rato entretenido y en paz.
Miro ahora lo que puse entre paréntesis, sobre convertir al Olaya en un estadio grande, moderno, que sirva para el fútbol profesional, y me imagino las peloteras de los W contra los X, de los Y contra los Z, antes o después de un partido de la A, en un estadio Olaya remodelado, y me arrepiento de pedir que lo amplíen. Mejor que lo dejen así, como un coliseo de barrio para partidos amistosos. No sea que al remodelarlo se transforme en un escenario de guerra.
lunes 15 de enero de 2007, 10:15 COT
[…] Jaime Medina, Don Chere, Marsares, Germ
domingo 7 de marzo de 2010, 11:21 COT
Muy buenos puntos de vista;agradables para aficionados al futbol especialmente al colombiano,espero volver a leer otros,por ultimo les pido el favor de alludarme a conseguir a mi hermano Carlos ALberto Meza{el negro Meza}hincha de Millos,anteriormente colaboro con Maracaneiros,amigo de Trapito y otros periodistas,y del exfutbolista Jimmy Diaz;les agradeceria me colaboraran pues no se nada de el hace mas o menos 15 anos