Nuestros héroes olímpicos
Columnas > Ración de graciasPor Marsares
mircoles 20 de agosto de 2008 13:49 COT
Salvo sorpresas de última hora, que en este nivel son escasas, a la hora de escribir esta nota ya terminaron para Colombia los Juegos Olímpicos. Una medalla de plata en pesas (Diego Salazar) y una de bronce en lucha grecorromana (Jackeline Rentería), un cuarto y un sexto lugar en pesas, un séptimo lugar en ciclismo de ruta, un noveno en la marcha de 20 km, un décimo en clavados, un cuarto lugar en la competencia de ciclismo femenino por puntos, son un balance que le da al país 30 puntos, igual al de los Juegos pasados.
Es decir, ni avanzamos ni retrocedimos. Simplemente seguimos ahí, aunque incursionamos en deportes exóticos para nosotros como el tiro con arco y los clavados. ¿Decepcionados? No, eso somos. Los deportistas que tenemos no se hacen desde su infancia en centros de alto rendimiento, con alimentación adecuada y programas científicos, al nivel de la excelencia. Ellos se hacen solos para escapar a la miseria en que viven. La medallista Jackeline Rentería vive en Siloé, un rincón deprimido de Cali. A los 13 años debió abandonar el judo porque no tenía dinero para los implementos y se pasó a la lucha.
James Rendón, que llegó en el puesto 31 en la marcha de 20 kilómetros vive desde hace 8 años en Ciudad Bolívar (Bogotá), donde habitan más de dos millones de pobres, y las zapatillas especiales para entrenarse con miras a los olímpicos se las consiguió un programa televisivo para reemplazar los raídos tenis que habían sido causa de varias lesiones. Su historia supera la fantasía. Con sus compañeros de un pobre club del barrio debió aplanar un terreno junto al que llaman los vecinos “el árbol del ahorcado” para poder entrenar, con tanta perseverancia que le ha alcanzado para ser campeón de Suramérica, de los juegos Odesur y puesto 25 en la Copa Mundo de Marcha.
Por eso, cuando ganan, lo que piden ante las cámaras como premio es una casa propia para que su familia pueda escapar de la miseria. Fue lo primero que se le ocurrió decir a Diego Salazar después de ganarse la medalla de plata y el coro lo completó luego Jackeline Rentería. Como es de rigor, los políticos salieron a decir que sí, que ni más faltaba. Uno espera que cumplan, pero ni eso. A Mabel Mosquera, medallista colombiana de los Juegos de Atenas, el por entonces gobernador de Santander, Hugo Aguilar, le prometió casa propia. Cuatro años después, todavía la está esperando.
Para ellos no importa. Por lo menos existe la esperanza y es cuando uno entiende su perseverancia diaria, pese a las carencias de su niñez que les malogró su biotipo y los coloca en inferioridad de condiciones frente a quienes son preparados desde que nacen para ser deportistas, como los fantásticos nadadores australianos y estadounidenses. Por eso una medalla de estos tercermundistas es más grande que la que se cuelgan los superatletas. Es que ganar a pesar de haberlo tenido todo en contra, es para quitarse el sombrero.
Pero como todo en la vida, sólo algunos logran cumplir sus metas. De los sesenta y tantos colombianos que fueron a China, unos ya están por terminar su ciclo y deberán retornar a su pobreza. Otros, como Rendón, persistirán junto a unos nuevos porque saben que la única oportunidad que les brinda la vida es ganar dentro de cuatro años una medalla olímpica, y aunque eso no es garantía de que salgan de la miseria, por lo menos el sueño los mantiene vivos y los convierte en gigantes donde quiera que compitan.
A todos recibámoslos como lo que son, héroes olímpicos.
mircoles 20 de agosto de 2008, 19:35 COT
Saliendo de mis vacaciones forzozas, debido a situaciones familiares complicadas, adelanto algo de mi próxima edición de “Con los Taches Arriba”, para mencionar que el balance colombiano en Pekín 2008 es pobre en comparación con su actuación en 2004. Muchas expectativas, muchas ilusiones pasajeras en boxeo, ciclismo de pista, atletismo y clavados, y al final solamente un par de medallitas.
Nuestros héroes hicieron lo que pudieron. El error de nosotros fue poner demasiadas esperanzas en ellos.
jueves 21 de agosto de 2008, 08:47 COT
Me pareció leer hace unos dias en el tiempo, que en realidad colombia sumaba hasta el momento 35 puntos (5 mas que en atenas), sería bueno que revisaras e hicieras la corrección respectiva.
Saludos!
viernes 22 de agosto de 2008, 10:16 COT
Eso sin contar la injusticia en una de las peleas de boxeo de un colombiano, el pobre pegaba y pegaba y los golpes de el no valian, es mas a ratos parecia que los goles del colombiano sumaban del lado del ruso.. daba mucha rabia ver como se cometia semejante injusticia en una prueba deportiva, uno espera eso de las guerras, de los politicos pero no en una olimpiada… igualmente paso con la niña de tawekondo ( 😛 no se bien como se escribe :P)… seguiremos esperando que algun dia el patinaje sea juego olimpico, toca que la chechi se deje ganar uno de los gringos para que el comite olimpico los meta para las proximas olimpiadas, y alla si los clavamos 😀
domingo 24 de agosto de 2008, 23:48 COT
bueno, es un balance positivo( para mi) si vemos hacia el futuro, son heroes por todo lo q han tenido q pasar, pero los queverdaderamente conocemos de deporte sabiamos hasta donde podian llegar, no vengan ahora con el cuento q esperaban una medalla de oro en ciclismo o cosas como esas. Decir q esos somos es menospreciar lo q tenemos, es caer en un lago de ignorancia y pesimismo q no nos lleva a ningun lado (sucede con el colombiano comun) y respecto al patinaje, aver si nos informamos bien y respetamos a nuetros deportistas, la esperanza seria si en el 2016 sea donde sea, porq en londres tampoco sera posible.
lunes 25 de agosto de 2008, 07:24 COT
Lastimosamente la decapitación con motosierra no es un deporte olímpico porque allí si habrían ganado todas las medallas.
lunes 25 de agosto de 2008, 11:02 COT
ayyy link2164 yo decia lo del patinaje de manera jocosa, no estaba siendo grocero, hay que seguir trabajando, ya habra la oportunidad de ganar medallas de oro de patinaje en una olimpiada, pero por las via legal, por las buenas, aqui talento es lo que hay, no se necesita de trampas ni mas faltaba
lunes 25 de agosto de 2008, 18:57 COT
Buehh, como sigo en apagón tecnológico por cambio de casa, y en vista de que mientras escribía el comentario anterior se cayó la página, seré breve.
Teníamos bases para pensar que la actuación iba a ser mejor, porque los deportistas habían hecho en su gran mayoría todo el ciclo olímpico y tuvieron buena preperación. Botero y Calle en ciclismo decepcionaron, los jueces nos metieron la mano descaradamente en la pelea con el italiano, y al clavadista Urán no le alcanzó para más.
La espera para que el patinaje sea olímpico va a ser larga y de aquí a allá necesitaremos sucesores de la actual generación brillante de patinadores. Cuando ellos estén trintones y cuarentones, será poco lo que podremos ganar.
Y alias Tequendama, si hubiéramos mandado una delegación de tiro con fusil y lanzamiento de bala, compuesta por farcos, tendríamos muchas medallas, pero habrían volado el Nido de Pájaro a punta de cilindros bomba.