De Enrique Leff y el pensamiento ambiental
Columnas > Eco-grafíasPor Carolina Giraldo y Germán A. Quimbayo
mircoles 13 de febrero de 2008 2:23 COT
Enrique Leff (Foto: Carolina Giraldo / especial para equinoXio)
La intención de generar estudios e investigación en materia ambiental en Colombia tiene una historia que se remonta hace más de veinte años. En el camino se han encontrado tropiezos tanto ideológicos como conceptuales que, sin embargo, han dado pie también a algunas iniciativas como la creación de institutos y facultades enfocadas al tema ambiental.
Un interesante ejemplo de ello ha sido el proceso llevado a cabo desde finales de la década del 80 en la Pontificia Universidad Javeriana de Bogotá, que vio el surgimiento de dos institutos en materia ambiental en los inicios de la década del 90. El Instituto de Estudios Ambientales para el Desarrollo (IDEADE) nació gracias a la necesidad de hacer investigaciones sobre la problemática ambiental desde diferentes puntos de vista, teniendo en cuenta el aporte de varias facultades de la misma universidad. El segundo, llamado Instituto de Estudios Rurales (IER), inició labores como un comité de investigación sobre la situación del sector rural en el país. Esto dio pie para que posteriormente surgieran las Maestrías en Desarrollo Rural y Gestión Ambiental, ligadas a la Facultad de Ciencias Económicas y Administrativas. En 1998 se integran los dos institutos, las dos maestrías y se suma el programa de pregrado en Ecología, creándose así la Facultad de Estudios Ambientales y Rurales. Después de casi diez años, en el segundo semestre del año 2007 se crea el Doctorado en Estudios Ambientales y Rurales, que pretende formar investigadores capaces de liderar procesos de análisis, planificación y ejecución de programas y proyectos ambientales y rurales.
Este marco de referencia nos ubica en el pasado miércoles 6 de febrero de 2008, en donde la Facultad de Estudios Ambientales y Rurales tuvo el honor de contar con Enrique Leff como conferencista de la Lectio Inauguralis (primera cátedra) del primer semestre del presente año. Este evento sirvió de paso para celebrar la inauguración del Doctorado en Estudios Ambientales y al aniversario número diez (10) de la carrera de ecología.
¿Por qué fue importante la visita de Leff?
Junto al señor Leff (derecha), aparecen Luis Guillermo "Brigitte" Baptiste, profesor e investigador asociado del departamento de Ecología y Territorio de la Facultad de Estudios Ambientales y Rurales de la Pontificia Universidad Javeriana; y Luis Miguel Rengifo, decano académico de la misma Facultad (Foto: Carolina Giraldo / especial para equinoXio)
La importancia de este personaje radica en que es uno de los más importantes pensadores ambientales de América Latina, a pesar de ser un Doctor en Economía. Sus principales líneas de investigación son la Epistemología Ambiental, la Ecología Política y la Educación Ambiental, y muchas de sus obras se caracterizan por recurrir a las grandes corrientes de la filosofía.
Durante la conferencia Leff comentó la historia que desembocó en la actual crisis ambiental y las posibles oportunidades para enfrentarla. Además, planteó que uno de los principales problemas que enfrenta el ambientalismo actualmente yace en la crisis del conocimiento (epistemología). Históricamente, el pensamiento platónico propuso que el estudio del funcionamiento de la vida se limita a investigar al individuo y sus particularidades, mas no su funcionamiento en el contexto en medio en el cual se desenvuelve (el todo es más que la suma de sus partes). Gracias a esto es que el ambiente ha sido estudiado desde visiones parcializadas en las que el hombre no ha sido incluido o, dicho de otra manera, el hombre no es parte de la naturaleza. Este pensamiento ha conducido a generar los conflictos ambientales que ahora enfrentamos, debido a que no somos capaces de comprender la complejidad ambiental y pensamos equivocadamente que la solución a esos conflictos solo está en manos de los expertos en el tema.
Otro reto que han enfrentado desde un principio los estudios ambientales radica en el encuentro de paradigmas que son aparentemente contradictorios: la economía-vs-la ecología y la política-vs-la ecología. ¿Es contradictorio el crecimiento económico con el ambiente? ¿Es posible un crecimiento económico sustentable? Gracias a este enfrentamiento han surgido dos ramas importantes en las ciencias y estudios ambientales: la economía ecológica y la ecología política.
Un tercer conflicto planteado por Leff es el de la identidad de los sujetos, en el que cada cual asume su visión sin reconocer la del otro y genera supuestos sesgados de la realidad (que es compleja y diversa). Estamos acostumbrados a que el académico e investigador es quien tiene el dominio absoluto del conocimiento porque simplemente generó conocimiento por sí mismo. Por su parte, algunas comunidades ven al académico como un sujeto de conflicto que sólo toma lo que necesita, no pregunta sobre el conocimiento local y se adueña de la información. ¿Cómo llegar a un punto medio? Sólo se logra con el diálogo de saberes que no es asumir lo que dice el otro como verdadero, sino aceptar que no existe una verdad absoluta y que la visión del otro puede complementar la de su contraparte.
Enrique Leff (Foto: Carolina Giraldo / especial para equinoXio)
También tuvo la oportunidad de comentar aspectos ya planteados en obras clásicas de este personaje, como su libro Ecología y Capital[1], en donde menciona que “…la articulación entre naturaleza y sociedad no se puede explicar en la simple relación cultura – ambiente, se debe centrar en analizar procesos ecológicos en la transformación de la naturaleza que se inscriben en las dinámicas de los aparatos socio – culturales, pero en especial en la dinámica del capital – considerando técnicas o tecnologías de apropiación de la naturaleza”.
Finalmente, en su conversatorio recordó algo también expuesto en algunos escritos[2], en donde la nueva geopolítica de la sustentabilidad se configura en el contexto de una globalización económica que lleva a una desnaturalización de la naturaleza, o a la mercantilización de la misma. Nuevamente entra la relación entre el mercado-capital y naturaleza que pervierte “lo natural”, planteando escenarios en donde la economía se “ecologice”.
Los ecólogos y ambientalistas tienen la ventaja de tener una visión amplia del mundo, que puede aportar de cierta manera a la solución de los conflictos ambientales. Nuestra misión (no solo para los ambientalistas, sino para todas las personas) es abrir la mente a los que nos rodean y generar una posición política para que de alguna manera esos esfuerzos se demuestren en hechos palpables que transformen la realidad. Recordemos que vivimos en un país en guerra, en donde los aspectos y decisiones socio-políticos y económicos son los que finalmente están configurando el paisaje y las funciones de los ecosistemas. La solución no está en crear nuevos parques, sembrar palma en todo el país, en echarles la culpa a los países industrializados o cosas por el estilo. Es saber escuchar a esas comunidades que tenemos olvidadas: afros, indígenas y campesinos. Reconozcamos sus saberes y complementemos con el saber académico.
¡Hasta pronto!
[1] Leff, E. 1994. Ecología y Capital. Racionalidad ambiental, democracia participativa y desarrollo sustentable. Ed. Siglo XXI en coedición con el Instituto de Investigaciones Sociales de la UNAM: México. 437 pp.
[2] Leff, E. 2001. La insoportable levedad de la Globalización: La capitalización de la naturaleza y las estrategias fatales de la sustentabilidad. En: Revista Venezolana de Economía y Ciencias Sociales. 7 (1): pp. 149-160. Disponible en formato PDF
domingo 7 de septiembre de 2008, 12:55 COT
EXELENTE SINTESIS, tiene una referencia que màs que eso es una ventana al mundo de la ecologia, y la simbiosis entre el ambiente y la sociedad.
ME interesaria mucho tener el contacto personal de este Doctor Leff, para hacer los tramites necesarios para llevarlo a mi escuela de sociología de la Universidad del Zulia., Venezuela.
Con mucho agradecimiento esperaria su pronta respuesta,
q tnga buen dia.
BR. BLANCA MENDEZ
Estudiante de Sociologia de la Universidad del Zulia.