“¿Usted de qué lado está?”
Estancias > Primera planaPor Marsares
viernes 30 de noviembre de 2007 15:43 COT
El 28 de noviembre pasado, el Polo Democrático Alternativo (PDA) celebró dos años de su fundación y por boca de su presidente Carlos Gaviria reafirmó que el partido persiste en sus esfuerzos por la paz y la democracia y que no se dejará “entrampar en el falso dilema de que quien no está con Uribe, está con la insurgencia”, enfatizando a continuación que el Polo no está “ni con Uribe ni con la lucha armada”.
Anteriormente, en lo que se refiere al incidente entre Chávez y Uribe a raíz de la cancelación intempestiva de los buenos oficios del primero como mediador para el intercambio humanitario, Gaviria se mostró prudente al afirmar que deben transitar un camino “más razonable y más sensato que el que en estos momentos están recorriendo” y los criticó advirtiendo que en sus reacciones "desmesuradas" posiblemente hubo razones de fondo distintas a las que esgrimen públicamente y los instó a que "recapaciten y planteen sus diferencias en términos distintos".
Aunque el Polo ha guardado prudente distancia del presidente venezolano y al interior muchos no comulgan con su modelo bolivariano, algunos miembros no ocultan su simpatía e, incluso, plantean un dilema con el modelo uribista. Una comunicación de Oto Higuita, miembro de la Dirección Nacional del PDA, dirigida a su organización, es una muestra de la discusión que se ventila dentro. equinoXio la transcribe para información de sus lectores:
"Solidaridad de clase: ¿usted de qué lado está?
A la metástasis que padecen las instituciones básicas del Estado colombiano, se suma ahora la grave crisis diplomática originada por la cancelación abrupta de la mediación para el intercambio humanitario que encabezaba el presidente de Venezuela Hugo Chávez y la senadora liberal Piedad Córdoba. Decisión radical tomada por el presidente de Colombia Alvaro Uribe quien puso en el congelador una vez más cualquier posibilidad de buscar la liberación los secuestrados por las FARC. Esta decisión llevó al presidente venezolano a responder afirmando que se sentía traicionado y no creía más en su homologo colombiano.
Ante ello, el presidente colombiano respondió con un duro discurso criticando lo que llamó la “expansión del chavismo” en el continente, su amistad con los “terroristas de las FARC” y las propuestas del presidente venezolano a favor de las clases populares del continente históricamente humilladas, excluidas y explotadas por oligarquías locales y las transnacionales.
Es evidente que el presidente Alvaro Uribe ha salido a responder desde una posición de clase, de derecha; a otra de izquierda como la que encabeza Hugo Chávez. Lo que hemos visto enfrentarse no son solo dos estilos personales de gobernar, sino dos visiones opuestas del mundo, de la política, la economía y la sociedad. Y hasta de la historia. El venezolano es un defensor sistemático y consecuente de Simón Bolívar y su legado histórico a los pueblos del continente; el colombiano es un defensor a ultranza de Francisco de Paula Santander, ambos estrategas y genios políticos de la época de la Independencia. Las posiciones de clase de nuestros presidentes reclaman nuestra solidaridad. ¿Usted de qué lado está?
Álvaro Uribe ha sido un defensor de las políticas expansionistas del imperialismo norteamericano en la región. Quien primero adoptó para el conflicto interno colombiano la doctrina de la “cruzada mundial contra el terrorismo” delineadas por la administración Bush a partir de los ataques a las torres gemelas del 11 S en el 2001, la cual también sirvió como plataforma de lanzamiento de su política expansionista hacia el medio oriente e invadir Irak.
Es clara, también, la defensa del presidente de Colombia de la estrategia de recolonización que para la región ha diseñado Estados Unidos. Política colonialista que se manifiesta en los planes de integración económica, política y militar tales como el Tratado de Libre Comercio (TLC), el Acuerdo de Libre Comercio para Las Américas (ALCA), Plan Puebla Panamá, el Plan Patriota, que ha privatizado el patrimonio público de los colombianos/as, entregándolo a los capitales transnacionales y grupos oligarcas locales.
El presidente venezolano Hugo Chávez ha sido, por el contrario, un defensor de la soberanía nacional, de nacionalizar los recursos naturales estratégicos como el petróleo, la plataforma marina, las telecomunicaciones, de la distribución de la tierra y crear incentivos y créditos bancarios para los más pobres, la nacionalización de la banca, etc. Por eso ha propuesto la integración de los pueblos en la Alternativa Bolivariana para América Latina y El Caribe (ALBA), un bloque regional económico y de poder entre las naciones latinoamericanas que contrarresten el peso de las transnacionales gringas en nuestras economías e incentive el crecimiento de las economías locales, buscando una distribución de la riqueza equitativa y justa.
Hugo Chávez ha manifestado en incontables ocasiones su posición antiimperialista y antimonarquista; su irreverencia con aquellos mandatarios del continente, el rey de España y quienes vienen conspirando contra Venezuela como el expresidente del gobierno español, José María Aznar.
La metástasis de la institucionalidad colombiana, se niegan tozudamente a reconocerla desde el mismo presidente Álvaro Uribe, el grupo parlamentario que lo apoya, los grupos económicos que controlan la economía hasta los medios masivos de información. La crisis diplomática entre ambos países, si llevara a la ruptura de relaciones y del comercio entra ambas naciones, lo cual implicaría que la economía colombiana dejara de percibir más de 3 mil millones de dólares que recibe anualmente a favor de su balanza comercial, en cambio, ha generado una actitud solidaria en los sectores oligarcas y el grupo de parlamentarios que apoya al presidente, cerrando filas a su alrededor. Manifiestan su solidaridad de clase, actúan como un cuerpo.
Es como si el Presidente colombiano, ayudado por la buena imagen y popularidad, gozara de una suerte de efecto teflón haciendo que la grave crisis política e institucional que arrastra la sociedad, le resbale. Así, no tendría que asumir la máxima responsabilidad política que le compete ante el colapso institucional.
No hay duda del fracaso de las instituciones históricas que hicieron posible la preservación del poder de la oligarquía y sus intereses. Por eso afirmamos que la sociedad colombiana requiere urgentemente de un nuevo paradigma de sociedad, de un nuevo modelo político, económico (radicalmente diferente del neoliberalismo) y cultural para hacer posible la justicia social, la verdad histórica sobre los crímenes de Estado y una sociedad democrática donde todos y todas vivamos dignamente.
A ella no llegaremos con falsas ilusiones sobre la realidad. El Polo, sus dirigentes y toda la militancia tienen que preguntarse cuál es la salida a la situación irreversible que vive la sociedad colombiana. En ese sentido, el Polo debe ponerse a la cabeza de un gran movimiento nacional de ciudadanos y ciudadanas por la dignidad y la verdad históricas. Convocar, aglutinar y jalonar un gran movimiento nacional por la indignidad (sic), contra el TLC, el recorte a las transferencias, etc.
No es momento de vacilaciones ni ambigüedades como bien lo dijo, recientemente, Carlos Gaviria, el presidente del Polo.
Estamos ante una oportunidad única de avanzar con una inmensa mayoría de la sociedad en la construcción de un proyecto alternativo de poder al que ha ejercido por más de 150 años la oligarquía colombiana. Contamos ya con la organización y la propuesta para asumir el rol de sujetos históricos de nuestro propio destino.
El pueblo venezolano y el presidente Hugo Chávez están asumiendo su papel y ello exige también nuestra solidaridad de clase. ¿Usted de qué lado está?
Oto Higuita
Miembro de la Dirección Nacional del PDA
29 de noviembre de 2007"
Buena pregunta para nuestros lectores. Claro que debería ser más amplia. El dilema está entre la democracia y el autoritarismo. ¿De qué lado está usted?
viernes 30 de noviembre de 2007, 15:47 COT
El cinismo del Polo democrático no tiene límites. Ojalá este maldito partido JAMÁS llegue a la presidencia de la república.
viernes 30 de noviembre de 2007, 16:27 COT
“Buena pregunta para nuestros lectores. Claro que debería ser más amplia. El dilema está entre la democracia y el autoritarismo. ¿De qué lado está usted?”
Marsares, no me queda claro: ¿se supone que “La democracia” es Chávez y “El autoritarismo” es Uribe? Porque esa parece ser la disyuntiva que plantea Oto. Por el bien de la humanidad, yo espero que esas no sean las únicas dos opciones posibles. Estaríamos jodidos.
viernes 30 de noviembre de 2007, 16:55 COT
j:
La democracia es la democracia, aquí y en cualquier parte, bueno, por lo menos para mi. Claro que depende de qué se entienda por democracia. Si los modelos chavista y uribista pueden considerarse como tales, o uno solo de ellos como plantea Oto o desde el otro lado José Obdulio, o ninguno de los dos. como puede pensar el resto. Le renuevo la pregunta. ¿Usted de qué lado está?
viernes 30 de noviembre de 2007, 17:17 COT
Si de socialismo se trata me inclino por un modelo social como el de Suecia. Sin peleas, sin países como cárceles (léase Cuba), sin exclusión de una fracción de la población que no está a favor del gobierno (léase Venezuela) y sin penalizar la expresión del opositor (Cuba, Venezuela, China, Corea del Norte…)
Está visto que el camino es la distribución de la riqueza pero el camino de chávez no es el correcto desde mi punto de vista
viernes 30 de noviembre de 2007, 17:24 COT
Me llamó la atención que Oto Higuita en el segundo párrafo de su artículo escriba: “terroristas de las FARC”. Así tal cual, con comillas…y después pelean.
viernes 30 de noviembre de 2007, 18:13 COT
Bueno, pero si en 2003 Higuita decía que el PDI era “el reencauche de los partidos de la burguesía colombiana” y que los referendos (me imagino que el de ese año acá, no el del domingo en Venezuela) son “[h]erramientas políticas a las que han acudido las clases dominantes cada vez que las condiciones socioeconómicas y políticas exigían cambios en las estructuras jurídicas y políticas de la naciente (sic) república”.
Este tipo es de los “tirapiedra” del ala radical del PDA. Y claro, los ultraderechistas fanáticos guerreristas (con libreta de segunda) y apologistas de quienes esclavizaron y violaron a sus ancestros vendrán a vociferar (como de costumbre) dándoselas de “demócratas”, cuando apoyan un régimen similar.
sbado 1 de diciembre de 2007, 03:47 COT
Marsares:
Pues creo que definitivamente no estoy del lado de Oto Higuita. Y por el bien del país, espero que el Polo Democrático tampoco.
sbado 1 de diciembre de 2007, 07:52 COT
Grosera y atrevida pregunta. Qué bueno no estar de ningún idiota lado. ¿Por qué se insiste tanto en ello y solo se ven o el blanco o el negro, o el bueno o el malo, o el sucio o el limpio? Y además “nos toca” estar con alguno.
No estoy de ningún idiota lado, no estés de ningún idiota lado, no estemos de ningún idiota lado. Cada quien es un ser y puede estar libre de Chávez y de Uribe, de Bush y de Ben Laden. Cada quien que viva su propia vida y no se deje encasillar.
sbado 1 de diciembre de 2007, 10:40 COT
¿Solidaridad de clase? ¿Todavía existe esa excusa tan pendeja? ¿La misma que sirve para que la izquierda -buena parte atea o al menos “agnóstica”- supuestamente tenga que aliarse con las "bellezas" extremistas islámicas como al-Qaida o Hamás, porque "toca" odiar a Israel por estar apoyada por los malditos gringos (cuando otrora muchísimos judíos y comunistas murieran en el holocausto que niegan Ahmadineyad y ciertos "izquierdistas" racistas y "chupamezquita")?
¿Y estos personajes son los que hay que considerar "inofensivos" porque supuestamente tienen "poco poder" en el PDA? A mí me perdonas, Marsares, pero no sé hasta qué punto pueda ser válido darles bombo a estas discusiones bizantinas dentro de esa colcha de retazos que es el PDA (ni hablar del partido de los puñaleros o de la coalición que apoya al gnomo pistolero).
Es claro que el tal Higuita es un chavista recalcitrante y que este tipo de "debates" le da elementos a la furiosa, rabiosa y babosa ultraderecha del primo de Pablo Escobar (y directo beneficiario de los crímenes de su familia) y de Londoño Hoyos para vociferar sus teorías paranoicas acerca de la "inminente" toma de Chávez si el PDA llegase a acceder al poder. Al infierno (o lo que sea) con Higuita y sus secuaces.
sbado 1 de diciembre de 2007, 10:46 COT
Como Higuita hay muchas personas que justifican estos discursos por que hay que tomar una “posición política histórica”. Y los que asumimos una posición libre sin tomar partido, tome, nos tachan de agua mansa o “convenientes”. Por favor, ese radicalismo es lo que nos tiene así de jodidos. Tal y como dice Sentido Común, es reducir la mirada del mundo al blanco y al negro.
Los discursos pueden ser distintos, pero no son más que retoricismos trasnochados (tanto de derecha como izquierda). La estructura de conseguir el poder es la misma así sea, en este caso, Chávez o Uribe. Esto históricamente está demostrado.
Latinoamérica sigue con esa lucha entre “clases” que no deja re-pensar otro modelo de sociedad. Obviamente el contexto histórico ha generado una represión social, pero estamos en el siglo XXI y la guerra fría terminó hace mucho tiempo. El mundo ha cambiado.
domingo 2 de diciembre de 2007, 09:08 COT
El problema del Polo es que en su seno coexisten muchas tendencias y la gran pregunta es ¿Podrán las contradicciones del polo resolverse en favor de un modelo autenticamente demócratico que a la vez no repita el discurso oficial en este país sobre “democracia” -aka Uribismo y su pretendida idea de que ellos son democraticos-? Dificil…dificil…
domingo 2 de diciembre de 2007, 18:14 COT
Mauricio:
Comparto su apreciación. Creo que no hay más que decir. La socialdemocracia europea es el ejemplo que todos deberíamos seguir, adaptándola a nuestras necesidades y nuestra cultura.
Felipe:
Cuando escribe eso está transcribiendo a Uribe. Una referencia literal, nada más.
Julián:
No sé si Higuita es “tirapiedra”, pero si pertenece al ala radical del PDA, sector que, por fortuna está en minoría.
j:
Igual yo. Y respecto al PDA, la mayoría de sus dirigentes pertenecen a la izquierda democrática, respetuosa del Estado Social de Derecho que nos rige.
Sentido Común:
Salvo que vivamos en una isla, apartados del mundo, tenemos forzosamente que colocarnos en alguna parte, incluso en la de los anarquistas, que escogen por voluntad propia, no estar en ningún otro lado que en el propio.
Julián:
Infortunadamente los dinosaurios todavía no se han extinguido. Y respecto a la izquierda que se alía con los extremistas del Islam, no es la izquierda democrática, sino la chavista que pese a conservar el mote de izquierda, no es sino el autoritarismo de derecha, disfrazado de oveja. Respecto a darle bombo a estas discusiones, es bueno que la opinión pública sepa que se está cocinando al interior del PDA, así sea un sector minoritario. No hay que esconder nada. Estos debates deben salir a la luz pública.
Germán:
La cuestión va más allá de lo que Higuita propone. El dilema no está entre Chávez y Uribe que en el fondo son lo mismo por el esquema autoritario que proponen. El verdadero dilema se encuentra entre democracia y autoritarismo. Y acá si hay que tomar partido. ¿Preferimos un sistema donde se respete la voluntad del mayoría y el disenso de las minorías, las libertades y las garantías fundamentales, o el basado en la voluntad de un líder reuniendo todos los poderes del Estado para su propio beneficio? El cruzarse de brazos y adoptar posiciones neutras, ayuda a afianzar el poder autoritario. El movimiento estudiantil venezolano es un ejemplo de que, pese al régimen, se tiene que tomar la bandera de la libertad, que espero, no sea un ideal mandado a recoger por el de “no me importa lo que pase”.
Sergio:
Si, es cierto. En el Polo hay tendencias variadas, con una discusión en su interior permanente, pero enmarcada en el respeto a las libertades democráticas y a la defensa a ultranza del Estado Social de Derecho, fijándose como meta su verdadero desarrollo, que aún está por verse, pese que ya han pasado varios gobiernos desde que entró en vigencia la nueva Constitución.
mircoles 12 de diciembre de 2007, 11:31 COT
solo se sabe que chavez habla de dignidad cuando el no sabe que es cuando no tiene la madurez para ser presidente y cuando lo unico que sabe es pelear con todos los paises del mundo ba a quedar solo y por eso estoy sin duda del lado de uribe
domingo 16 de diciembre de 2007, 09:34 COT
El tirapiedra este ahora arremetió contra Lucho Garzón:
http://polodemocratico.net/Los-conversos-y-la-lucha-de-ideas
domingo 16 de diciembre de 2007, 12:14 COT
p:
Yo, en lo particular, del lado de la democracia.
Julián:
Se estaba demorando. Y no es la única voz. Un amigo mío hace poco me dijo que los poderosos están contentos con Lucho porque eso es lo que ellos necesitan, un buen gerente que les administre sus propiedades. Una visión añosa, que seguramente no comparten los muchos que se beneficiaron en Bogotá en salud, educación y nutrición. Porque según sus ideales gobernar bien es favorecer a la burguesía. De donde se desprende que hay que gobernar mal para llevar a cabo los ideales revolucionarios. Una visión anclada en las ruinas del Muro de Berlín.