Benazir Bhutto, pionera y polémica
Estancias > Katherine EscobarPor Julián Ortega Martínez
jueves 27 de diciembre de 2007 23:13 COT
Quien haya seguido la situación de Pakistán en los últimos meses difícilmente podrá sorprenderse del asesinato de la ex primera ministra paquistaní Benazir Bhutto, la tarde del jueves 27 de diciembre en Rawalpindi, cercana a la capital Islamabad, en medio de un ataque suicida, por un disparo al cuello, según algunos, o las esquirlas de una explosión, según otros. La líder del centroizquierdista Partido Popular de Pakistán (PPP), de 54 años, iba decidida a ganar las elecciones del 8 de enero y a hacer valer el pacto contraído con el presidente (y ex general) Pervez Musharraf, acuerdo repudiado por muchos de sus seguidores, que lo vieron como una traición a su padre, Zulfikar Ali Bhutto, ejecutado por los militares. Pero estaba en la mira de los extremistas islámicos, de los talibanes (que negaron cualquier implicación) y de algunos "elementos" gubernamentales.
Adorada por los medios extranjeros y educada en Occidente, Bhutto pasó a la historia en diciembre de 1988, cuando se convirtió en la primera mujer en llegar al poder en un país islámico. Su gestión, no obstante, se vio manchada en sus dos periodos como primera ministra (1988-1990 y 1993-1996) por acusaciones de corrupción, producto de las "cacerías de brujas" iniciadas por los presidentes Ishaq Khan y Farooq Leghari, respectivamente, así como de una pobre gestión económica en su segundo mandato. Mientras su marido estaba en la cárcel por los mismos cargos y cortes suizas y paquistaníes decidían su suerte, Bhutto abandonaría el país en un exilio voluntario en los Emiratos Árabes Unidos.
No obstante, y a pesar de ser su enemigo, Bhutto accedió a pactar con Musharraf su regreso al país, tras haber negociado en 2004 la libertad de su marido (ambos llegaron a tener orden de captura internacional de Interpol). El régimen de Musharraf había cambiado la constitución en 2000 para impedir que los primeros ministros fueran reelegidos por segunda vez, lo que impediría un tercer periodo de Bhutto. No obstante, el general accedió a amnistiarla de los cargos y de las condenas en su contra. Así las cosas, la ex primera ministra volvería el 18 de octubre de 2007 a Karachi, donde fue recibida con un fallido intento de asesinato en su contra, excusa para que el recién reelegido presidente Musharraf, aliado de Estados Unidos, decretara el estado de emergencia y la supresión de las libertades individuales (así como el cierre de los canales de TV privados). Bhutto y los líderes de los demás partidos opositores serían puestos bajo arresto domiciliario. Semanas después, Musharraf renunciaría al uniforme y anunciaría elecciones generales para enero de 2008, fecha para la cual todos los pronósticos apuntaban a que el liderazgo de Bhutto al frente del PPP le iba a dar la mayoría parlamentaria. Así, la democracia, se creía, volvería (¿o llegaría?) paulatinamente a la convulsionada nación del sudeste asiático.
Tanto al-Qaida, que odia el laicisismo de Bhutto y su apoyo a una intervención estadounidense para atrapar a Osama bin Ladin, como Musharraf, por aparente "negligencia", son los principales acusados. Y aunque es muy probable que al ahora ex general le caiga como anillo al dedo el asesinato de la carismática líder para reimplantar el estado de excepción, el ejército ya no le es tan leal como antes, a pesar del nombramiento de su protegido Ashfaq Kiyani al frente de las fuerzas militares. Aunque es posible que trate de aplazar los comicios, no se sabe si EUA y el Reino Unido, que les habían apostado mucho a las elecciones, lo permitan.
Recursos:
¿Sucesores? The Times de Londres señala al vicepresidente del PPP, Ameen Fahim, como un posible candidato, descartando de plano al marido de Bhutto, Azif Zardhari, alias señor del 10%, por las comisiones que supuestamente cobraba en los contratos gubernamentales cuando su esposa ostentaba el poder.
El asesinato de una mujer que, a pesar de sus puntos negros en su hoja de vida, representaba la única esperanza de que la democracia, o algo que se le pareciese, llegara a Pakistán, ha echado más leña a un peligrosísimo polvorín (con armas nucleares incluidas). Una mujer que, a pesar de todo, era de un carácter recio, segura de que sólo Dios podía disponer de su vida, como le dijera al prestigioso diario conservador británico en una entrevista concedida a Ginny Dougary. La odiaban los fundamentalistas, por poner en entredicho lo que supuestamente representan "los valores islámicos" para ellos. Una mujer que quería una nueva era para su país y además había logrado abrir el largo y tortuoso camino. Bhutto, nos guste o no, era, como bien se definió a sí misma, "la hija del destino".
viernes 28 de diciembre de 2007, 08:38 COT
[…] Cita de equinoXio.org – Benazir Bhutto, pionera y polémica […]
viernes 28 de diciembre de 2007, 08:48 COT
al-Qaida se ha atribuido el asesinato, según una agencia paquistaní con sede en Roma.
viernes 28 de diciembre de 2007, 11:49 COT
Gracias Julián por esta nota. Como toda pérdida de vida humana es triste lo que le ocurrió a la señora Bhutto. Sin embargo el personaje merece que nos detengamos más en el análisis. Habría que descifrarla más. Alain Lallemand ha venido escribiendo en Le Soir sobre otras facetas no tan “democráticas” de su vida (apoyo a los Talibanes en sus comienzos, feminista solamente de fachada, sus relaciones con los USA, etc.) Lo triste del cuento es que si el pueblo tenía la memoria corta los enemigos de Bhutto no. Y ahora que les queda a los de Pakistán para elegir : militares o neo-talibanes?
jueves 10 de enero de 2008, 12:43 COT
BENAZIR BUTTHO, UNA MILLONARIA INGLESA CON NOMBRE HINDU, INEPTA, CLASISTA, MURIO DEFENDIENDO LO QUE LE PERTENECE A SU FAMILIA: EL FEUDO DE PAKISTAN