Cuando perder es ganar
EditorialPor Sentido Común
lunes 29 de mayo de 2006 1:10 COT
La verdad, la tesis de Maturana funciona muy bien en ocasiones como esta.
Luego de una aburrida campaña, marcada por la novedad de la figura del candidato-presidente, ampliamente manipulada en contra de sus opositores por el talante avasallador de Uribe, el pueblo terminó recibiendo una lección anunciada de cómo vender una panela. Pero más allá de este aprendizaje, vale la pena reflexionar sobre otros aspectos destacados.
Una gran alegría se respiraba en el Polo Democrático Alternativo minutos después del cierre de las elecciones, cuando comenzaron a consolidarse los resultados de las votaciones y los mismos señalaban ya un segundo lugar para su candidato Carlos Gaviria Díaz. No era para menos pues la votación obtenida en esta ocasión por la izquierda es de lejos la mayor lograda en la historia de Colombia. Con seguridad que este hecho representa el fenómeno más destacado de las elecciones del 28 de mayo.
Pero más sorprendente resulta el triunfo del Polo, al entender que este movimiento político con todos los fierros es fruto de un tenaz trabajo de relojería (con el cual se logró coherentemente la unión de diversos matices de la izquierda democrática), mientras que por su parte. la organización Primero Colombia que manejó la campaña de Uribe no es en sí un partido o movimiento político, sino apenas una empresa de oportunidad gerenciada por Fabio Echeverri, que aglutinó al Partido de la U, a Cambio Radical, a Colombia Democrática, Partido al Conservador, a Dejen Jugar al Moreno, al peñalosismo y a otras fuerzas que apoyan conjuntamente a Uribe en busca de una ‘tajada’ del poder que tienen en las manos. Visto así, el Polo se consolida como la primera fuerza política en votos en esta contienda.
Un rápido análisis a las cifras revela una segunda verdad, como es que el 55% de la población en edad de sufragar no creyó en el sistema y se abstuvo de hacerlo. Es decir, el triunfo de la reelección de Uribe es ampliamente superado por quienes no creen en el establecimiento. Los votantes a su favor representan entonces solo un 27,5% del total de los electores potenciales, apoyo real con el cual Uribe gobernará durante su segundo período.
Salvo la elección de Belisario Betancur, muchos colombianos hemos sentido que el relevo de los presidentes se hace entre personajes de una misma casta socio-política, pero lo más triste en esta ocasión es que ni siquiera habrá relevo. Entonces ahora nos toca repetirle al mismo personaje lo mismo que dijimos hace cuatro años: ojalá que le vaya bien, presidente, porque así le irá bien al país. Aquí entre nos, a él le fue bien, pero al país no.
lunes 29 de mayo de 2006, 12:49 COT
Lamento no poder hacerme ilusiones. Una cosa es Carlos Gaviria y otra cosa son Navarro, Petro y Samuel Moreno.
lunes 29 de mayo de 2006, 15:20 COT
Si la reelección era previsible, sinceramente creo que la gran victoria la lograron los sectores democráticos y de izquierda que votaron por Carlos Gaviria, no solo por la altísima cifra lograda en el número de votos, sino por desplazar a una tercera posición al Partido Liberal en la escena política. Me parece que es un síntoma de que se le está perdiendo el miedo a “ser de izquierda”, cuando sencillamente es una opción, como cualquiera otra. Claro que hay “izquierdas de izquierdas”. Acá en democracia, por ejemplo, han sido presidentes: un demócrata cristiano (Alwyn), un demócrata cristiano (Frei), un socialista (Lagos) y una socialista (Bachelet). Propuestas y argumentos son los que deben prevalecer. Colombia tendría que estar feliz de que los demócratas hayan dado ese paso histórico. Pero yo no sé. Abrazo.
lunes 29 de mayo de 2006, 16:29 COT
Me parece simpático que acabo de escribir un post sobre el tema de la abstención y los resultados de las elecciones si se la toma en cuenta. Como siempre, felicitaciones por los artículos.
martes 30 de mayo de 2006, 08:40 COT
Vaya, Julián, qué pesimismo. Lucho Garzón y su equipo en la alcaldía de Bogotá están haciendo un buen trabajo, demostrando que la izquierda si puede gobernar con responsabilidad, eficiencia y honradez. En Nariño, un movimiento independiente que hace poco adhirió al Polo, lleva varios años demostrando que sí se puede sacar de la postración a un departamento y enrutarlo por nuevos caminos, ajenos al bipartidismo. LO propio puede decirse de Medellín, con un Sergio Fajardo que con hechos demostró que las nuevas ideologías pueden remediar los males del pasado. La izquierda se está preparando para gobernar, con juicio y buen tino, y aunque algunos aún caigan en excesos verbales, las gestiones de Petro, Moreno Díaz y Navarro en el congreso, son brillantes. Eso lo reconocen propios y extraños. Y así cunden los ejemplos. Por fortuna.
sbado 3 de junio de 2006, 12:45 COT
Bueno la verdad estaba buscando en internet los resultados exactos y todo lo referente a la votacion del 28 de Mayo y me encontre con este post con el que estoy en total desacuerdo, igual cada uno puede expresar lo que quiera pero en un comentario deberia primar la objetividad con lo que acepto la “victoria” por parte del polo democratico, que con seguridad sera uno de los hechos por los que estas elecciones no pasaran desapercibidas aunque para nadie puede ser un secreto que se confirma la reeleccion del presidente donde no queda mas que decir que no hay mejor campaña que el mismo gobierno!y volviendo a la “venta de panela” la parte etica e integral no se le quita a nadie a menos que sea necesario desprestigiar a los demas… Me despido feliz por poder decir que lo que antes era campaña se convirtio en todo un hecho ADELANTE PRESIDENTE!
sbado 3 de junio de 2006, 21:17 COT
Bienvenida Daniela!
Es posible que al encontrar sitios como equinoXio llegues a la conclusión de que las cosas tienen más de una forma de mirarse. A pesar de que estes “en total desacuerdo”, no puedes negar que encontraste las cifras que buscabas: Colombia virtual (Uribe) 27,5% Colombia real 72,5%. Un saludo y te esperamos siempre por estos lados, porque el debate enriquece y este país está muy pobre.
domingo 4 de junio de 2006, 08:30 COT
Debo decir que vote por el PDA.
Pero si queremos ganar perdiendo debemos ser realistas y tratar de entender porque el candidato presidente no solo repite su votación sino que la incrementa. Y si luego todos los demas somos antiuribistas solo seríamos como el 36% y ello ya trae reflexiones.
Porque ejemplo seguir pensando que al”país le fue mal” es ir contra la percepción mayoritaria, no por ello correcta, si por lo menos digna de ser considerada.
Debemos repensar el sentido de la política en beneficio de las mayorías, de todas y eso nos va adar pistas.