El día que Dios hable
Artículo destacadoPor Sentido Común
mircoles 9 de abril de 2008 23:45 COT
Grabado en billete de $1.000 de Colombia, Banco de la República
Colombia es uno de los países más violentos del mundo, fruto de lo cual ha pagado una onerosa cuota en muertos, orfandad, viudez, dolor y miseria humana. En medio de ese torbellino de sangre, algunos hechos extraordinarios logran romper ocasionalmente el característico mutismo colectivo de un pueblo acostumbrado, cada vez más, a protestar en privado.
El 9 de abril de 1948 el asesinato de Jorge Eliécer Gaitán, y los hechos de violencia que el mismo desencadenó, partieron en dos la historia de Colombia. La desaparición del caudillo, quien entonces representaba la reivindicación de los anhelos populares, abrió más la brecha entre ricos y pobres, dejando en estos últimos una imborrable marca de insatisfacción, frustración e impotencia políticas, que se reflejan modernamente en el abstencionismo.
Los destrozos, incendios y saqueos producidos por el llamado bogotazo, que por poco acaban con la ciudad capital, fueron la manifestación física de la rabia en el corazón de un pueblo enardecido. La vida de quien predicaba paz y justicia social, de quien había presidido la gran Marcha del Silencio, era segada brutal e inexplicablemente por balas criminales, en lo que constituiría el comienzo de una cadena interminable de magnicidios, asesinatos políticos, masacres, atentados y desapariciones, muchos de ellos sin resolver hasta hoy. Violencia engendra violencia.
Sesenta años después, el 4 de febrero de 2008 se produce un suceso que, sin exagerar, podría partir en dos la historia de la sociedad civil colombiana. El 4F viene a ser algo así como un despertar. Masivamente y en todo el mundo, los colombianos salimos a la calle a expresar nuestro rechazo a la violencia histórica, encarnada de buena manera en el nacimiento, desarrollo y desviación del grupo guerrillero autodenominado FARC-EP, producto inicial tanto de las diferencias sociales, como de la intolerante idiosincrasia colombiana.
Apoyada prácticamente por todos los estamentos de la sociedad, incluido el Gobierno y excluida increíblemente la principal fuerza opositora a éste (PDA), la marcha del 4 de febrero se convierte de lejos en la más caudalosa demostración de protesta pacífica que el país haya presenciado. Primó el sentimiento de dolor por las víctimas del secuestro y las balas, sobre las arengas políticas destempladas o el discurso presidencial transmitido desde Valledupar.
Mientras el Gobierno intentaba pescar la segunda reelección en río revuelto y la izquierda se daba golpes de pecho por su mal paso, la contundencia del acto pacífico y apolítico quedaba flotando en el aire como un veto tácito a la guerra. A todas las guerras, pues la gente del común reclamamos paz.
Pero si el pueblo es superior a sus dirigentes, como afirmaba el propio Gaitán, el juego del poder es superior a la voluntad del pueblo. Siempre habrá Chávez y siempre habrá Uribes prestos a mancillar el mítico e imaginario mandato popular, fortaleciendo y manteniendo el statu quo, a la vez que sus particulares hegemonías.
Prueba de ello es que, no bien se habían desvanecido las imágenes de la marcha del 4F, cuando ya el Gobierno Uribe invadía suelo ecuatoriano para aplicar la pena de muerte a un pez gordo de las FARC, acción inhumana no contemplada por la legislación de ninguno de los dos países; reacción inmediata del mandatario ecuatoriano, orquestada y aumentada por el de Venezuela, fue darle carácter de héroe al guerrillero bombardeado, miembro de la organización cuya conducta delictiva y terrorista el pueblo colombiano acababa de dejar en evidencia ante los ojos del mundo, y guerrilla a la que Ecuador y Venezuela parecen encubrir. Acto seguido, el guerrillero liberado al gratis (junto con cientos de secuaces) por "razones de Estado", Rodrigo Granda, advirtió en un demente y cínico comunicado que las FARC no le jalaban a la liberación de los rehenes en su poder si no había una nueva liberación de presos, ya ofrecida por Uribe y un nuevo despeje, ignorando la marcha del 4F, a la que no se han referido nunca, obviamente. ¿Dónde quedamos los marchantes que no compartimos ninguna de estas acciones?
Una revuelta popular en 1948, una marcha pacífica sesenta años después. Y la política sigue siendo el rastrillo que barre las pretensiones de los hombres y mujeres, quienes solo aspiramos a vivir en paz, sobre el suelo en el que nos correspondió nacer. Cuán equivocado estaba Hesiodo cuando sentenció aquello de que “la voz del pueblo es la voz de Dios”. Dios es mudo.
jueves 10 de abril de 2008, 03:18 COT
Duele y mucho, que Colombia tenga que vivir lo que todos sabemos. es momento de parar eso.
jueves 10 de abril de 2008, 04:20 COT
Muy interesante el ángulo con que miras esta importante fecha histórica y la figura de Gaitán. Felicitacioens
El título y tu cita central no los comparto por una razón: la voz del pueblo no existe. El pueblo es un invento del caudillismo, de los populismos y de los partidos comunistas del siglo XX. Que ahora están tratando de recalentar Chávez, Correa y el ex-liberal Uribe.
Existen los ciudadanos.
El pueblo y la sociedad son entelequias. En nombre del pueblo se han cometido atroces crímenes. La patria es otra entelequia, existen ciudadanos dentro de un territorio definido como nación.
La voz de Gaitán no era la voz del pueblo ni por tanto la voz de dios. Era la voz de un político valiosísimo a quien asesinaron para mantener en el poder a un partido político al que nunca le interesó la equidad, la justicia social ni la paz.
Opino yo.
jueves 10 de abril de 2008, 08:08 COT
Ludo:
Duele y no vemos cerca el día en que pueda parar.
Álvaro:
De acuerdo y en desacuerdo, pero más lo primero que lo segundo.
A mi modo de ver, la noción de pueblo como masa útil al gobernante no ha desaparecido, simplemente ha mutado y hoy la conocemos como opinión pública, que tampoco existe más que en las encuestas, base primaria de la democracia, ese sí el verdadero gran embeleco.
Pero de allí a creer que no exista el pueblo como población gobernada hay mucho. Es justamente ese pueblo el que se acerca a las urnas cada tanto a elegir a los políticos que luego critica. Y es ese pueblo el que cree tener en la democracia el cielo: yo te elijo, tu me representas, yo soy Dios, tu hablas por Dios. Y el político llega al cielo, pero resulta que efectivamente Dios es mudo y entonces el gobernante se dedica a hablar por sí mismo.
El establecimiento, imposición y aceptación de la existencia de fronteras territoriales define las bases del concepto nacionalidad. Aparece entonces la noción del habitante como poblador del territorio en general, y la del ciudadano como habitante de las ciudades y pueblos. Independientemente del sistema de gobierno, todos ellos conforman una sociedad civil que acata el mandato de los gobernantes, estableciéndose así la autoridad. Dominada física y mentalmente la masa humana, nacen las naciones, las comunidades territoriales y los imperios.
Como ves, no es invento comunista eso del pueblo. Es invento de los más vivos, sobre los más bobos. Viva (algún día) la anarquía.
jueves 10 de abril de 2008, 08:53 COT
El problema de colombia es y será eminentemente político. Y para la muestra un botón: Medellín renacida de las cenizas porque Sergio Fajardo motivó a la sociedad, y la sociedad al completo reaccinó y así lo quiso. La que un día fué la mas abandonada y la ciudad más violenta del mundo, hoy en día la más bella de Colombia.
Un saludo
jueves 10 de abril de 2008, 09:13 COT
P3drarias:
En mi concepto, la política es un problema eminentemente humano que constriñe nuestra libertad desde su raíz.
jueves 10 de abril de 2008, 10:48 COT
Qué artículo tan crudo, no tengo más palabras.
jueves 10 de abril de 2008, 14:31 COT
[…] artículo está disponible en ESPAÑOL An engraving in a COP$1,000 banknote with Jorge Eliécer Gaitán’s […]
jueves 10 de abril de 2008, 17:37 COT
Filipogs:
Hola. Ese crudo es bueno o…
jueves 10 de abril de 2008, 18:24 COT
Querido Sentido Común:
Ya me llamaba la atención que equinoXio no tocara el tema de El Bogotazo.
Anoche pude ver por The History Channel un programa especial que me dejó meditando acerca de lo que tu mencionas como la intolerante idiosincrasia colombiana.
¿Qué hace que los habitantes de Colombia concreten su rabia contra las injusticias sociales a través de las armas? ¿Por qué no ocurre lo mismo en otros países latinoamericanos con problemas sociales tan similares?
Me produce mucha tristeza esa dualidad de Colombia, tan linda, con gente tan dulce, amables, que hablan precioso, más culta que el promedio latino, con grandes artistas y por otro lado esa incapacidad crónica para organizarse de tal manera que disminuyan los factores provocadores de violencia.
También me genera esperanza que Dios no se haga el sordo y escuche a esa gran mayoría de personas que se movilizó el 4F por la no violencia.
Cariños y felicitaciones por esta entrada.
jueves 10 de abril de 2008, 21:11 COT
Martica:
Pienso que definitivamente la violencia es una espiral que se alimenta sola cuando se encuentra inmersa en un caldo de cultivo como es el de la desigualdad social, unida a muchos odios ancestrales. Algunos incluso llegan a afirmar que en parte la causa de nuestra violencia está ligada a factores genéticos, teniendo en cuenta que quienes poblaron esta parte del continente fueron descendientes de los primeros colonos españoles, delincuentes desterrados de la península ibérica o vagabundos aventureros en busca de fortuna. Al respecto habría que recordar que las primeras infamias contra la población indígena, y posteriormente contra los esclavos negros, fueron cometidas no por estos personajes, sino por la iglesia católica.
Hoy por hoy, Colombia es un país disimuladamente racista y clasista, donde indio y negro son palabras que denotan inferioridad y bajeza. No es un tema nada fácil de abordar y hacerlo resulta crudo, como lo advierte Filipogs en su comentario.
Gracias por tu reflexión y por ver también nuestro lado positivo…
SC
viernes 11 de abril de 2008, 10:57 COT
Entré a leer qué decia EqX sobre esta celebracion del 9 de abril y oh sorpresa! encuentro el guion de History Caracol channel (cf Vulturno). Ilustrativo.
viernes 11 de abril de 2008, 12:54 COT
De acuerdo con o-lu. Hay un paralelismo hasta sospechoso con el “documental” del miércoles.
viernes 11 de abril de 2008, 13:28 COT
O-lu:
La verdad, no he visto el documental de THCh a que aludes, pero me produce gran curiosidad hacerlo para ver cual es el paralelismo de que hablas.
Este humilde artículo que apenas refleja mi visión personal de la violencia en Colombia lo escribí prácticamente todo la semana pasada, antes de que se emitiera el documental mencionado, que entiendo pasó el 9 de abril.
Me duele y me molesta sí, el manto de duda que se tiende en tu comentario; si algo conocen los lectores en mi trabajo es criterio y creatividad, la que afortunadamente tengo de sobra como para ponerme a buscar “inspiraciones” por ahí.
Prefiero tomarlo positivamente, como un lindo halago, razón por la cual enviaré una hojita de vida a The History Channel.
Un saludo y gracias por comentar,
Sentido (un poco)
sbado 12 de abril de 2008, 03:58 COT
Sentido Comun,
Te aumento mi comentario, que te genero molestia.
Primero te aclaro que yo no vi, por obvias razones, el documental THC-Caracol. Sencillamente lei la resenha que hizo Victor Buitrago (http://sewerwatcher.blogspot.com/) y lei tu nota. (Como lei lo que los medios colombianos produjeron sobre el aniversario 60 del asesinato de Gaitan).
El punto no es sin te copiaste o no de THC. El comentario es mas bien como se lee hoy un episodio historico. Veo que en 2008 se esta produciendo un “relato historico” nuevo, se esta introduciendo en el guion de la historia del Bogotazo el vector 4F (y tu nota esta bastante centrada en torno al 4F).
Me parece un enfoque ideologizad, casi caricaturesco, pero que se corresponde bien con el “relato dominante” en este momento en Colombia (y por tanto no es invencion
tuya, sino de vmedios, intelectuales, etc (THC es uno entre tantos)
cuendi , algunos medios, intelectuales, etc (THC es uno entre tantos)
cambiando vision del Bogotazo en un hilo y la reaccion 4F
de caracter politico-historiografico.
sbado 12 de abril de 2008, 04:00 COT
Sentido Comun,
Te aumento mi comentario, que te genero molestia.
Primero te aclaro que yo no vi, por obvias razones, el documental THC-Caracol. Sencillamente lei la resenha que hizo Victor Buitrago (http://sewerwatcher.blogspot.com/) y lei tu nota. (Como lei lo que los medios colombianos produjeron sobre el aniversario 60 del asesinato de Gaitan).
El punto no es sin te copiaste o no de THC. El comentario es mas bien como se lee hoy un episodio historico. Veo que en 2008 se esta produciendo un “relato historico” nuevo, se esta introduciendo en el guion de la historia del Bogotazo el vector 4F (y tu nota esta bastante centrada en torno al 4F).
Me parece un enfoque ideologizad, casi caricaturesco, pero que se corresponde bien con el “relato dominante” en este momento en Colombia (y por tanto no es invencion
tuya, sino de varios medios, intelectuales, siendo THC uno entre tantos).
Eso es lo que pienso, como ves no tiene nada que ver con ser o no copietas.
sbado 12 de abril de 2008, 12:32 COT
Quiubo O-Lu.
El título original del escrito era No Más Marchas, y efectivamente estaba centrado en las recientes movilizaciones del 4F, 6M y 6A, aunque incluía una clara alusión a Gaitán y su asesinato, suceso matriz de toda esa violencia que se vive aún hoy. El argumento central siguió siendo el mismo, la banal representación que tiene el pueblo dentro de las democracias.
Cuando el mismo 9 de abril se me pide a última hora incluirlo como Destacado, modifico la estructura del texto y le doy un leve giro, pero conservando como eje mi línea de pensamiento, de la que derivo siempre la lectura personal de los hechos actuales y de los históricos. Ignoro si ella coincida o no con el “relato dominante” en Colombia, que no dijiste cual es, pero es mi manera de ver y decir las cosas. Recuerda que no existe una acertada y otras falsas; solo hay distintas maneras de leer la historia.
Si no habías visto el documental de THCh, mal hiciste en basarte en esa virulenta reseña de Buitrago que citas, para afirmar que mi artículo refleje el guión de un documental que yo tampoco vi, precisamente por estar terminando mi escrito. A veces nos hace falta un poco de rigor al momento de comentar el trabajo de otros.
Te invito a releer con ojos más objetivos El Día Que Dios Hable y probablemente encontrar, tanto el verdadero mensaje, como la lógica para hilar el bogotazo con las marchas recientes.
Un abrazo, Sentido (ya no)
Adenda: Gracias por la aclaración a lo de copietas; tal vez me dejé confundir por el comentario siguiente al tuyo, que sí tiene ese malicioso sentido.
sbado 12 de abril de 2008, 19:51 COT
Sentido C,
Acabo de volver a leer tu articulo. Definitivamente como texto de conmemoracion del aniversario 60 del Bogotazo o como texto de reflexion sobre la pertinencia de la frase de Gaitan “el pueblo es superior a sus gobernantes” (y no la frase para crédulos que encabeza tu articulo) me parece desafortunado -y tu aclaracion confirma que tu intencion era otra.
Lo del “relato” que une el 9 de abril con el 4F es porque he visto desfilar la especie en algunas paginas… Lo de Victor B. y el programa de THC venia a insertarse en algo que ya habia percibido y que creo seguira (pero admito que aca estoy haciendo ciencia ficcion; aunque créeme, soy buena en ese género).
Precisamente, para ajustar bien el ciclo 9 de abril- 4F, apostaria a que tendremos antes que “discutir” teorias como que a Gaitan lo mato Stalin (teoria made in Eduardo MAckenzie, el mismo sr. que difunde la teoria que dice que fue Fidel Castro quien mando matar a Salvador Allende). Un discutidor de la teoria escribio recientemente en El Tiempo:
http://www.eltiempo.com/opinion/columnistas/otroscolumnistas/ARTICULO-WEB-NOTA_INTERIOR-4085424.html
Asi, toda la (mala) historia colombiana de los ultimos 60 anhos seria culpa de un complot comunista de la que solo saldremos gracias a… asuntos providenciales como el 4F. Parece que me hubiera desviado pero no, no tanto.
un saludo,
OL
sbado 12 de abril de 2008, 21:31 COT
O-Lu:
Creo que sería un aporte a la blogosfera que siguieras en la ciencia ficción…y en Paris.
domingo 13 de abril de 2008, 00:37 COT
O-Lu
“La frase para crédulos que encabeza el artículo” fue escrita (como todo el artículo) por un crédulo, no obstante todo el texto es apto para no crédulos. El hecho de escribir Dios con mayúsculas no nos hace menos capaces de opinar sobre política o cualquier otro tema.
El artículo “El Día Que Dios Hable” para nada tiene como fin conmemorar el 9 de abril. Apenas es un texto alegórico que refleja una situación tan real hace 60 años, como hoy. Aprovecho la fecha como recordación, pero no me interesa centrarme en los hechos mismos, menos atinarle a una teoría como las que mencionas. Eso ya de poco sirve.
Se siente en tus palabras un cierto resentimiento contra lo que no esté de acuerdo con tu pensamiento, y tu discurso no es claro. Es bastante frío y lejano de la realidad colombiana, tal vez por la distancia en que te encuentras. Pienso que el suceso que viviste en la marcha del 4 en París no es un común denominador de lo que sucedió aquí, donde realmente la gente se sustrajo mayoritariamente de la política. Si el Polo Democrático se hubiese sumado a la marcha en lugar de torpedearla, esta habría sido aún más contundente. Pero es pedirle peras al olmo.
Saludo,
SC
domingo 13 de abril de 2008, 14:28 COT
Sentido C,
No discutiré tus impresiones (“resentimiento”, “distancia”, “PDA”…) porque no hay nada que comentar. Anulas cualquier posible discusion.
Simplemente, lamento que no te hayan gustado mis comentarios a un articulo que fue publicado el 9 de abril y que lei cargado de dicho contenido.
A quien firma como Toro: No comento anonimos.
domingo 13 de abril de 2008, 17:09 COT
¿Y cuál es tu nombre o-lu¿
domingo 13 de abril de 2008, 21:46 COT
Hola O-Lu, qué pena, no es mi intención anular la discusión. Me pasé de franco y eso afecta el diálogo cuando no hay suficiente confianza.
Sobre tus comentarios, no es tanto que no me gusten (salvo la primera impresión en que sentí me tratabas de “copietas”, como dices tu), como que no entiendo muchos de los argumentos que usas, y no capto para donde vas. Mi sensación es que crees en una versión única del mundo, la tuya, y las demás están erradas. Muy seguramente el errado sea yo, te ofrezco excusas.
Me ancanta verte por acá (y por allá), no lo dudes. Tenemos más cosas en común que diferencias.
Adenda: Creo que has conseguido un admirador taurino. Torealo, jeje.
Toro: Saludos y no te molestes con mis chistes flojos.
SC
lunes 14 de abril de 2008, 04:49 COT
Pero en los tiempos de Gaitán no había de ésto:
Hola, me llamo Kaodan González, y soy un spambot de Facebook. Al principio yo era un osito que viajaba por todo el mundo, pero después me secuestraron las FARC y me volví una cadena cada vez mas radical, terminando como la invitación a una marcha.
A la marcha [del 4 de Febrero] no sólo fueron los ricos con acceso a internet que tienen cuenta en Facebook y añadieron a Jerry Uribe como amigo, sino también los que les daba vergüenza no tener banda ancha, ni cuenta en Facebook, ni ser amigos-facebook de Jerry Uribe. También fueron actores con problemas mentales y gente común que se siente muy triste cuando muestran en televisión todos esos niños que recluta la guerrilla, pero no tan triste cuando ven en los semáforos a esos molestos desplazados por los paras que no quieren trabajar sino asolearse todo el día.
Yo mismo como spambot, y todos mis hijitos que generé cada vez que mutaba gracias a la mala ortografía de los usuarios de Facebook, trabajamos por meses hasta llegar a todas las FUNBOX de colombianos y extranjeros, para que hasta el último apartamentero de Nueva Jersey fanático de Juanes nos apoyara.
Ni nosotros los spambots ni los medios ni el partido de la U ni el Opus Dei tienen nada que ver con la página de la marcha, donde cualquiera que hubiera tecleado [ctrl][alt gr][shift][F6] y después [alt][delete] y [ctrl]LMN hubiera llegado a un archivo donde podía consultar todos los certificados de que los organizadores no tienen ninguna filiación política, de que ningún acto de su vida tiene contenido político alguno, y que no aspiran a ningún cargo público ni a trabajar en ninguna campaña por la reelección de nadie.
Noten que a pesar de mi naturaleza spam me he abstenido de sugerirles que aumenten el tamaño de sus órganos genitales, o que pierdan su fortuna familiar en un casino, o que me den su contraseña de gmail. Espero que semejante esfuerzo por comportarme me valga un espacio en este blog para debatir los argumentos, algo que los spambots hacemos tan bien.
lunes 14 de abril de 2008, 13:13 COT
A mí, que me tiene Gaitán hasta la coronilla. Esta conmemoración me hace pensar en un país que no ha podido superar su propia historia de enfrentamientos armados y de desigualdades.
Marta decía atrás que por qué en Colombia -al contrario de América Latina- resolvemos enfrentarnos con las armas en vez de encontrar salidas civiles, o civilizadas, pero no hay tal. En América latina muy pocos podrían tirar la primera piedra. Desde México, pasando rápidamente por Guatemala, El Salvador, Nicaragua, Venezuela, Ecuador, Perú, Chile, Brasil, Bolivia, Paraguay, Uruguay y Argentina, todos han creido en las armas como método para recuperar el poder o para mantenerlo. Que no se nos olvide.
Gracias todo ello, claro, al ejemplo de la “revolución cubana”, que ahora parece comenzar a desgranarse. Eso fue fatal para A.L. y llenó su segunda mital del siglo XX de atrocidades de todos los lados. Nadie tiene su bandera inmaculada.
Una Nación -pueblo, sociedad- que son entelequias o conceptos para poder entenderlos y analizarlos, toma rumbos imprevisibles, convenientes o inconvenientes, con grandes y a veces pequeñas acciones o decisiones. Pero en Colombia nos hemos equivocado muchísimo. Porque a quines han tenido el poder sólo les han importado los intereses personales o de partido o de grupo económico. Sencillo.
Dos generales decidieron embarcarse en una guerra terrible que en tres años mató
o dos terceras partes de la población del país, y ahora nos parece un suceso memorable de nuestra historia. Fue la “Guerra de los mil días”, un lamentable hueco en nuestra pobre evolución como país. ¿Les hemos cobrado su responsabilidad? No. Seguimos tratándolos como héroes.
Un presidente aceptó, presionado por los E.U., vender a Panamá, y recibió un puñado de dólares que no sabemos en qué se invirtieron.
Unos dirigentes políticos del momento mandaron matar a Gaitán para que no llegara a la presidencia, y caímos en manos de Gómez y de Rojas Pinilla. ¿Mejor o peor?
A Lleras Camargo y a Gómez se les apareció la Virgen en Sitges, España, y nos “salvaron” con el terrible Frente Nacional, un enbeleco con el que dos partidos resolvieron repartirse el país. Así lo manejaron y expoliaron.
A unos mafiosos -al parecer- les daba miedo de ser extraditados por Luis Carlos Galán y con el aplauso de políticos cercanos lo ajusticiaron antes de que llegara a la presidencia. Me pregunto…¿el país sería otro hoy?
Tenemos una clase dirigente experta en mantener sus emporios gracias a gobiernos que les son proclives, que les pagan favores. Es una clase dirigente que ha adoptado la más cínica concepción neoliberal, la de que el solo crecimiento económico a la larga bastará para sacar de miserables a los más miserables y de pobres a los más pobres. Así que será necesario alimentar y hacer crecer sus capitales en la misma medida. Y punto. Es decir, si los ricos no crecen mucho, los más pobres, menos.
Ese estado de cosas es el que que en A.L. alimentó las guerras de múltiples grupos armados que fueron aleccionados y aún apoyados por la revolución del señor Castro. Entre ellas las Farc. Y lo que motivó también las respuestas terribles de los gobiernos y de sus fuerzas armadas, en nombre del derecho y de las instituciones. A Salvador Allende lo tumbaron y lo asesinaron con ese argumento. Y con la bendición de Estados Unidos, país que metió la mano untada de billetes en toda A.L. con tal de mantener sus intereses. Y nos dejamos.
Y ese fue el mismo argumento de Fujimori, en Perú, y ahora de Uribe contra las Farc: la patria. Los intereses más altos de la patria!
Por eso en Colombia tenemos que mirar más bien el frente, al horizonte. Solo con nuevas organizaciones de la sociedad civil y con el rescate de los valores perdidos, porque en nuestro país las ansias de dinero fácil lo pervirtieron todo, podremos cambiar el lamentable estado de cosas. O si no, vean a un congreso con 30 de sus miembros en la cárcel y que se niega a renovarse. A un presidente que no tiene ojos sino para la guerra. A una clase empresarial empeñada en el lucro a costa del futuro de todos. Y a una guerrilla que perdió no solo el norte sino todos los puntos cardinales.
Por eso Gaitán ya fue. Pongámosle punto.
lunes 14 de abril de 2008, 13:39 COT
Lanark:
De acuerdo con usted; en 1948 no existía Internet, por lo que los spambot de la época prefirieron quemar los tranvías, saquear almacenes, destruir sedes políticas, incendiar casas de oligarcas, etc, etc. Parecido, aunque en mayor proporción, a los desmanes en Bogotá al final de la marcha del 6M. Es que definitivamente la cosa violenta parece estar en los genes. Solo nos salvaría una mutación.
lunes 14 de abril de 2008, 14:06 COT
Carlos:
Y ahí nos quedaremos dando vueltas en círculo, buscando al culpable. Que Fidel, que Nixon o que Osama; que no, que mejor la CIA o la KGB ¿y qué tal Ospina Pérez o Turbay? cuando el culpable está muy cerca.
Para ti, para O-Lu y para todos, una pistica de donde pienso yo que puede hallarse a ese gran responsable de todos nuestros males…aquí esta.
lunes 14 de abril de 2008, 15:41 COT
Sentido…común
No leiste bien. No busco precisamente responsables. Ni me siento uno de ellos. Hablo de una cadena de errores que es necesario romper. Y ahí si estamos de acuerdo.
Nos espera el reto de un país nuevo.
martes 15 de abril de 2008, 02:01 COT
Carlos:
No me refería a tí como el “caza-culpables” y creo que sí leí bien tu buen comentario.
Un saludo,
SC
martes 15 de abril de 2008, 02:48 COT
SC,
Muy buenos pildorazos historicos en el enlace que refieres! No sabia que postulabas la abstencion consciente, algo a lo que también he llegado, ni mucho menos que te decias anarquista de logo.
Un gusto leer tu veta satirica (que personalmente prefiero a la “analitica”).
PS: De los tres de la foto solo reconoci a Enrique Santos C y a Ernesto Samper, quién es el tercero?
martes 15 de abril de 2008, 09:06 COT
Gracias O-Lu.
Bueno, a medida que avanza el viaje de la vida nos vamos corriendo hacia algún lado del bus. La tendencia mayoritaria es hacia la derecha, y unos pocos se apretujan en la banca de la izquierda; yo me estoy acomodando de lo más rico en la anarquía monárquica, la banca de atrás.
p.s.: E. Santos Calderón y Gordito? Un tercero? Para dónde se fue que se fue mijitica?
martes 15 de abril de 2008, 23:55 COT
Carlos:
La historia, una vez más la Historia, llena de violencia en Colombia y América Latina.Pero quién hace la historia sino los pueblos, me pregunto.
Cuba no impuso la violencia en el continente; más bien reaccionó -desde la época de Martí- contra el despojo y la desigualdad a que fue sometida por el imperio español primero y norteamericano más tarde. No tuvo otra opción que la de las armas y tuvo éxito en su gesta libertaria una y otra vez.
Las guerras oligárquicas como “la guerra de los mil días” que mencionas, así com las guerras de los caudillos, las guerras civiles del s. XIX y XX, las guerras de exterminio de nuestros pueblos originarios son todas guerras injustas, donde el pueblo es carne de cañón y sujeto pasivo de intereses ajenos.
Tal como afirma Sentido Común, la violencia seguirá presente mientras exista desigualdad. Bien señalas que mientras la inepta y ambiciosa clase empresarial del continente rija los destinos de nuestros países, basada en la perpetuación de privilegios, con una sociedad civil disgregada no escaparemos jamás del círculo de la violencia.
Los avances en democracia, con más justicia social y sociedad civil emponderada, no sólo parecen ser los requisitos del desarrollo sustentable, sino también las condiciones para el cese de la violencia en nuestra América Latina.
jueves 17 de abril de 2008, 19:05 COT
Hola SC:
Quiero decirle al SR. Uribe De los Ríos que es imposible que en Chile podamos olvidar que en algún momento se usó la violencia para resolver los conflictos.
Otra cosa es lo que ocurre en Colombia, como él mismo dice, en Colombia existe una cadena de errores, a eso me refiero, a esa incapacidad crónica para resolver los conflictos de otra forma, como lo han hecho otros pueblos.
Tampoco creo que sea un rasgo genéticamente heredado. ¿Cómo voy a creer que piensas eso “anarco monárquico? ¿Los bebes colombianos nacerían con un gen de la violencia?
Me parece más inteligente Alberto de los glaciares (que se están derritiendo). Ya hemos escuchado que no se puede hablar de un estado democrático hasta que no se supere la inequidad social.
Entonces, tendremos que armarnos de paciencia china.
Un beso para SC y Alberto.
jueves 17 de abril de 2008, 22:17 COT
Es de perogrullo que la paz comienza por dentro. Cada uno de nosotros le debemos una gota de ella a la paz mundial. Mientras no exista esa conciencia personal, seremos esclavos de los regimenes, de los patriotismos, de las causas de otros y de la polarización entre izquierdas y derechas.
sbado 19 de abril de 2008, 11:27 COT
Colombia es un pais que por mas que pasen los años nuca la violencia va a dejar de cesar
martes 29 de abril de 2008, 19:13 COT
Resulta que tu país colombiano “no ha resuelto la violencia como los otros países”. Qué insulsos. Todavía la violencia existe soterradamente en nuestras escuelas y en nuestras fábricas. En todos los gobiernos existen una sarta de estafadores de oficio que hablan en nombre de los pueblos. en todos los pueblos hay muertes que pasan por ser fabricados por la delincuencia. Son todos los mismos muertos. Muertos que no son impotantes. Son muertos del mismo pueblo.
sbado 3 de mayo de 2008, 11:47 COT
Sólo la equidad y la justicia social resolverá los Problemas de L.A con una alta dosis de conciencia y participación ciudadana, en el desarrollo de la democracia
No las revoluciones exaltadas que terminan siempre siendo un “quitate tu pa poneme yo”