Ecos de la marcha del 4 de febrero
Artículo destacadoPor Marsares
mircoles 13 de febrero de 2008 14:03 COT
Marcha del 4 de febrero en Bogotá (Foto: Marsares / equinoXio)
Nunca en la historia de Colombia el pueblo se había manifestado en tal forma contra algo en especial. El 4 de febrero lo hizo contra una agrupación armada que, en su degradación, se convirtió en una empresa criminal, constituyéndose no sólo en una vergüenza para el país, sino para la humanidad. Pero aparte del rechazo mismo, varias enseñanzas y consecuencias quedan para el futuro.
La coordinación
No es la capacidad de convocatoria lo que ha de resaltarse. Sin la ayuda de los medios de comunicación, el grupo de Facebook Un millón de voces contra las FARC no se habría constituido en el fenómeno multitudinario que asombró a muchos. Lo fascinante es que, gracias a este medio, se pudo organizar el evento simultáneamente en muchos lugares del planeta.
En cada ciudad de las 165 en las que se marchó, a través de Facebook se colocó un encargado de coordinarla, se informó de sus adelantos, del correo al que debían dirigirse los interesados, los sitios y horas donde se realizaría e, incluso, las consignas y los emblemas. Todo como un relojito. De ahí que, llegado el momento, la marcha se desplegó por el mundo a tiempo y sin mayores tropiezos.
El enemigo común
Aparte de si es acertado o erróneo que hubiera sido dirigida la marcha contra uno solo de los actores violentos, lo cierto es que la inmensa mayoría de los marchantes, en una especie de catarsis colectiva, marchó con un solo objetivo: rechazar a las FARC. Incluso, muchos que no están de acuerdo con la “Seguridad democrática”, unieron su voz a los demás. Todos marcharon contra un enemigo común.
Esta identificación casi unánime, es novedosa en el país. Sin importar condición social, grado de ilustración, credo, etnia… en un universalismo del desprecio que sorprende por su fuerza, se tiene en este momento un enemigo que une a todos los colombianos: las FARC. Su pérdida completa de espacio político hace que de aquí en adelante la agenda de los futuros gobernantes deba contemplar obligatoriamente la derrota subversiva sin atenuantes.
La oposición se destiñó
La ambigüedad del PDA respecto a las FARC resquebrajó sus posibilidades de convertirse en alternativa de poder para el 2010. Su lánguida concentración en la Plaza de Bolívar, no más de 5.000 personas en corrillos, huérfana de directivas, apática, muestrario de políticos menesterosos, los convirtió en los parias del 4 de febrero.
Ni siquiera parecía una concentración de las de antes, donde la falta de gente la suplían con gritos y banderas. Su miopía condenó a muerte el proyecto. Mientras sus miembros carismáticos se unían a la gran marcha, la Plaza de Bolívar olía a naftalina. Volvieron a quedar solos los izquierdistas de museo. Sus mejores dirigentes no tardarán mucho en formar un partido moderno, democrático y de centro, lejano de dogmas y verdades reveladas.
Los medios de comunicación
Modelaron la noticia, la impulsaron, la sostuvieron y la difundieron. Todo lo demás se convirtió en secundario. Los días anteriores a la marcha, hora tras hora, en radio, prensa, TV, se repetían las imágenes de los secuestrados, los testimonios de sus familias, frases, cuñas, entrevistas, conteo de afiliados a Facebook, invitación a la marcha, convirtiendo en éxito todo lo que tuviera que ver con ella.
Pero fueron más allá. Inflaron el hecho convirtiéndolo en noticia mundial. Los colombianos creímos que en realidad, el mundo entero se había levantado contra las FARC. Sin embargo, las noticias llegadas de las ciudades donde se realizaron las marchas, dicen otra cosa. La cobertura de los medios locales fue escasa o nula, incluso sorprendiendo a los transeúntes que ignoraban de qué se trataba el suceso.
La marcha fue simbólica en el exterior
En Colombia fue exorbitante la concurrencia. Diez millones de personas marcharon en todos lados. Una multitud que rebasó las expectativas más optimistas rechazó a las FARC. Pero en el exterior, aunque meritorias las marchas, sus participantes fueron escasos. En Nueva York, Miami, Londres y Madrid donde vive el mayor número de colombianos, no pasaron de 3.000 personas cada una. Una excepción fue Caracas (30.000) pero coyuntural porque allí también se marchó contra Chávez. En los demás sitios la presencia fue entusiasta pero pequeña.
La realidad es esa. Los problemas de Colombia involucran sólo a los colombianos que viven en Colombia. Los que residen en el exterior sólo participan en las fiestas patrias o en situaciones coyunturales como ésta. Es natural. Tienen sus propios problemas de supervivencia y sólo sienten al país en las noticias, la música o los recuerdos. No les queda tiempo para más.
Estamos solos
Gestos como los de Javier Solana de la Unión Europea o Alan García en Lima, se agradecen pero son simbólicos. La verdad, incluso para Estados Unidos, es que somos apenas un país de Latinoamérica que poco le interesa al mundo como hace poco lo resaltaba Andrés Oppenheimer. De ahí la importancia de la marcha. Por lo menos estamos unidos para enfrentar a la guerrilla y eso ya es mucho.
El pero es que la cuenta de cobro es grande, comenzando por el otro enemigo de Colombia, el paramilitarismo. Su legalización, conservación del poder regional, ausencia de reparación a las víctimas y rearme, no auguran nada bueno para la democracia colombiana. La marcha minimizó a los paramilitares y avaló el modelo de solución militarista pero sólo contra la guerrilla. Los otros ya pertenecen al establecimiento.
¿Y las FARC?
No supieron jugar sus cartas. Tampoco su aliado venezolano que vio diluirse su proyecto expansivo. Y ahora deben tratar de salir del paso lo menos mal posible. El anuncio de liberación de los tres secuestrados por razones de salud y el de un cronograma para la liberación de los demás, según lo expresó Piedad Córdoba, es indudable que busca aminorar los efectos de la descomunal marcha que les cerró todos los caminos.
El despeje pasó de ser un inamovible a un encarte. El país, está claro, no quiere nada distinto a que devuelvan a los secuestrados. Lo harán a cuentagotas, pero lo peor del cuento, es que nadie se lo va a agradecer. El secretariado va a necesitar de muchos más actos para recuperar credibilidad, pero la intransigencia y miopía de Marulanda no les permite un mayor juego político. Por lo pronto, como las arterias de su jefe, habrá que esperar a que se taponen definitivamente para que se abran nuevos caminos de diálogo.
La Seguridad democrática va para largo
Más allá de la reelección de Uribe lo que mayor preocupación causa es el fortalecimiento del poder ejecutivo en detrimento de los otros poderes, desdibujando la esencia de la Carta del 91. El año entrante la Corte Constitucional se renueva en su mayor parte y, seguramente, llegarán juristas cercanos a este modelo de Estado que privilegia el presidencial, con un parlamento convertido en su apéndice.
En 2010, salvo un hecho extraordinario, se le renovará el mandato a la Seguridad Democrática (a Uribe o a un uribista), erosionándose los principios fundamentales del Estado Social de Derecho, que se fundamenta en la pluralidad política, regresándose a la hegemonía de la Regeneración y su concentración absoluta del poder, corrompiendo las instituciones democráticas, con una oposición reducida a su mínima expresión luego de que el PDA ingrese a la lista de proyectos fallidos de la izquierda.
La Seguridad Democrática, como las telenovelas de mayor audiencia, se alarga para conservar el rating de la derecha recalcitrante y excluyente que hoy gobierna a Colombia.
mircoles 13 de febrero de 2008, 16:34 COT
Investiguen esto: MISILES IRANIES INSTALADOS EN VENEZUELA APUNTAN HACIA COLOMBIA.
mircoles 13 de febrero de 2008, 16:46 COT
No me extrañaría en absoluto. El arsenal militar de Venezuela es impresionante. Para los incrédulos, pueden visitar este link:
http://www.fav-club.com
mircoles 13 de febrero de 2008, 17:56 COT
Marsares, me gusta mucho la pregunta “cuando los colombianos dicen No más FARC ¿en qué están pensando realmente? ¿En acabarla por la vía armada o en confrontarla con la realidad de que no tiene apoyo popular y es mejor que se entregue voluntariamente? Como cronista utópico me gustaría creer en la segunda, pero la popularidad de Uribe hace pensar que la mayoría se inclina por la primera. ¿Cómo lo ves?
Como nota al margen te cuento que en la prensa holandesa ese día se destacó más la noticia de la posible liberación de 3 secuestrados de las Farc por razones humanitarias. La noticia sobre la marcha apareció al día siguiente, 2 párrafos, haciendo eco al cable de la AP más una noticia sobre la marcha en La Haya, que convocó alrededor de 300 personas (www.colombiaemb.nl). No tuvo ningún eco en los analistas de nuevos medios, desafortunadamente.
Muy bueno este cierre del especial Marsares, felicitaciones de nuevo.
mircoles 13 de febrero de 2008, 18:45 COT
Muy buen análisis, Marsares. Racional, lógico y más allá de simples ideologías. Eso es lo que a mí, personalmente – y quienes me conocen saben que no soy amigo de marchas – me gustó del 4 de febrero.
Claro, queda el RIESGO obvio: las FARC son el enemigo común innegable, hay que rechazarlas y, como hacen los médicos, es lógico atacar una enfermedad a la vez (una fractura de tibia y peroné en una pierna con infección sólo se puede operar tras eliminar la infección, ¿Thilo?)
Pero ese enemigo común podría, eventualmente, tomar un cariz inquietante: Hitler logró en gran parte la unidad del pueblo alemán en torno al antisemitismo.
Y respecto a la izquierda, “Mientras sus miembros carismáticos se unían a la gran marcha, la Plaza de Bolívar olía a naftalina.”
Es hora que los “comunistas” de vieja guardia se jubilen (so pena de que los jubilen a la fuerza) pues ya la gente empieza a entender que izquierda no es necesariamente igual a esgrimir la hoz y el martillo y que oponerse a los imperios capitalistas no es lo mismo que seguir obnubilados por las palabras de filósofos de ideas e ideales tan muertos como ellos mismos. Que Marx, Engels, Lenin, Mao, no pueden resucitar. Que la simple manipulación populista de las masas bajo la bandera de una revolución que ya es imposible es tan grave como las políticas estatales que ellos mismos denuncian y condenan. En resumen, que los sesentas se terminaron hace tiempo, que la URSS pereció y que hasta China se ha permitido evolucionar – al menos eso es lo que nos cuentan.
mircoles 13 de febrero de 2008, 20:02 COT
Bueno Mornatur, tu comentario es más que válido en mi opinión, así como la comparación, aunque en ambos casos hay que actuar simultáneamente (Cirugía + AB). Una fractura abierta o cerrada de hueso largo puede dar tromboembolismo pulmonar, muy grave. Y la infección no va mejorar con hueso expuesto. Y si es un émbolo con infección, puede dar endocarditis, shock séptico, etc. No se pueden hacer reducciones cerradas/abiertas y/o fijaciones óseas en hueso enfermo eso sí, o sea fijar clavos ahí. Eventualmente hay que hacer limpieza quirúrgica o drenar abcesos, según se asocie con osteomielitis o con celulitis. Pero sí, la E. coli o la Salmonella que se asocia a la mayoría de cuadros de este tipo efectivamente se parece a los enemigos “beligerantes” de la nación colombiana, como los gobiernos de Nicaragua, Bolivia y Venezuela, no sé si también ¿Francia?, ¿Brasil?, ¿Argentina?. Análogamente, los discursos que inciten a la violencia, al terrorismo o a la complacencia con el delito (Chávez) se deben combatir al mismo tiempo que a la guerrilla. La izquierda democrática tendrá que ser más crítica y exigente con sus dirigentes, y con aquellos que promueven la intolerancia, y/o justifican los delitos de lesa humanidad de las Farc con los delitos de las Auc, en un extraño acto de escapismo moral y ético, a lo Houdini. Deben tomar la iniciativa en las reformas políticas de su partido, y no esperar actuar al vaivén de las encuestas de opinión, que les son altamente desfavorables. Es por demás reprochable que un dirigente con la inteligencia y el altísimo intelecto de Carlos Gaviria, un verdadero genio teórico del derecho constitucional, haya logrado tan poco en su intención de posicionar al Polo como una fuerza política creíble, y una verdadera alternativa de poder. En el exterior es una inminencia, en el interior él y sus dirigidos son vistos como mamertos, lo que redundará en votaciones menos favorables cada vez. El equilibrio no es que todos puedan delinquir, o que haya impunidad en lado alguno. El equilibrio es que los criminales de guerra sean aislados de la sociedad y sometidos a todo el rigor de la ley. Si la izquierda colombiana sigue sumida en su confusión de lo que constituye una praxis política legítima, será por su propia responsabilidad. Ya no pueden alegar que “los persiguen”, y como ocurrió en París con ese señor Álvaro Luna, que terminó diciendo las mismas pendejadas que dicen los chavistas y dizque bolivarianos, cuando una periodista de la W no lo quiso entrevistar en las marchas del 4F en París, en una mezcla ya sospechosa con los tales comités de IB: “que el unanimismo esto y aquello, que es que los medios de comunicación están al servicio de no sé quien”, que la voz de cuatro pelagatos vale más que la de millones de colombianos, etc. Buena parte de Europa también debe dejar su complacencia con el delito cuando reclama descaradamente entregarle nuestra soberanía a terroristas, o haciendo apología de asesinos como los tales daneses de “Lovers and fighters”. Inaceptable. Parece que ya se les ovidó la segunda guerra mundial…
La marcha del 4F que más me conmovió fue la de Venezuela: contra viento y marea, con gravísimos problemas de abastecimiento alimentario, bajo un régimen cada vez más intolerante con la libre expresión, salieron a marchar, por nosotros, sus hermanos colombianos. De manera que este Chávez leninista o facista, tiene hoy una aceptación del 38% de los venezolanos, y con tendencia a la baja.
Finalmente, hay que darle a todas las víctimas de la violencia, sin importar el apellido del vérdugo, un sustento económico si lo requieren, y una reparación moral simbólica, pues la vida desafortunadamente, se pierde para siempre, y por eso sólo queda evitar a toda costa que se vuelvan a dar las condiciones para tanta barbarie. Y de una u otra forma, eso implica robustecer las fuerzas armadas, y por supuesto, al ramo judicial.
Ese es mi tratamiento recomendado.
mircoles 13 de febrero de 2008, 21:05 COT
[…] FARC, the role of the mass media in the demonstration's success), equinoXio's chief-editor remarks [ES]: Los problemas de Colombia involucran sólo a los colombianos que viven en Colombia. Los que […]
mircoles 13 de febrero de 2008, 23:16 COT
[…] artículo puede leerse en ESPAÑOL A banner against FARC that says "Colombia does not want FARC terrorists!! No more […]
jueves 14 de febrero de 2008, 15:50 COT
Muy buen artículo, Marsares. Excelente análisis. Veo que eres muy crítico del Polo y con muy buenos argumentos. Pero yo creo que se trata de un movimeinto con mucha sangre joven y con buenos políticos que sabrán superar este entuerto o reorganizarse como pronosticas.
jueves 14 de febrero de 2008, 23:38 COT
¿Cómo le quedaría el ojo al rey peninsular, Juan Carlos de Bribón, después que las FARC rechazaran su mediación para el acuerdo humanitario? ¿Por qué no te callas rey Bribón? ¿Por qué?
viernes 15 de febrero de 2008, 11:04 COT
Tequendamia, ¿y eso qué tiene qué ver con el artículo? ¿Por qué no se va a lamerle el, perdón, las botas a su queridísimo presidente Chávez y deja de importunar a personas que en realidad intentan hacer buen uso de su intelecto?
viernes 15 de febrero de 2008, 13:52 COT
Mornatur,
Muy fácil. Algo que Marsares no tuvo en cuenta en su análisis, es que antes de la marcha, las FARC eran conocidas sólo en un puñado de países, éstos eran nuestros vecinos y Francia y quizá Suecia donde hay farcos refugiados. Si acaso eran conocidas en EUA era sólo a nivel de sus aparatos de seguridad más no por el grueso de la población. Lo mismo se puede decir en otros países, pero por ejemplo ¿cuando se había oído hablar de las FARC en las calles de las ciudades en Australia, al otro lado del planeta?
Lo desproporcionado de la protesta hizo que las FARC de pronto aparecieran en el mapa mundial e hizo evidente la guerra civil que se vive en Colombia. En este nuevo contexto, las FARC son un nuevo y muy importante actor en la geopolítica mundial. El desplante hecho a España por las FARC, como mediadores en el acuerdo humanitario, y en este nuevo contexto, adquiere un peso y un significado muy grandes. Se empieza a notar que España ya no tiene en Sudamérica la influencia política suficiente para ser un mediador neutral y creíble, se empiezan a ver las consecuencias del famoso e imprudente ¿Por qué no te callas?
Es más, se sabe que el desplante es una retaliación por el insulto real, el cual también le dio la vuelta al mundo como el nombre de las FARC.
viernes 15 de febrero de 2008, 16:07 COT
Eragón:
Parodiando al poeta. Todo nos llega tarde, hasta la guerra fría. Hasta en esto mostramos subdesarrollo. Hoy la tenemos en pleno. Uribismo contra bolivarianismo. Y un diablo burlón, tras las cortinas, reía, reía.
OIMC – Ex ciencia y conciencia:
Lo bueno es que ya lo compró pero todavía no le ha llegado,. Los expertos calculan que más o menos en dos años, Chávez tendrá suficiente armamento para amenazar con una aventura militar.
Daniel:
Tengo una respuesta más. En nada. Simplemente en que dejen de joder y se construyan su propio infiernito, allá en lo profundo de la selva, y funden la República leshmaniática de farquezuela. Y respecto a lo que cuentas de la prensa holandesa, igual pasó en muchas partes. Infortunadamente. Es un problema doméstico. Tan sólo eso.
Mornátur:
Atinado lo que dices y es lo propio que hace Chávez en Venezuela. Escoger un enemigo común para afianzarse en el poder. Acá, la derecha militarista, pretende eternizarse en el poder inflando el globo farquiento de Marulanda, mientras tras bambalinas oculta sus ejércitos privados de exterminio, depredación y despojo. Y respecto a los dinosaurios estalinistas, sólo hay que escucharlos hablando para viajar en el tiempo a la esclerótica URSS y sus gulags de viejo cuño.
Thilo:
“El equilibrio es que los criminales de guerra sean aislados de la sociedad y sometidos a todo el rigor de la ley”. De acuerdo. Sólo que acá a un tipo que hace el paseo millonario le dan 40 años de cárcel, mientras a Don Berna y cia., luego de los descuentos de ley, apenas tendrá 4 años de prisión como castigo por haber asesinado miles de colombianos y haber contribuido en alto grado (junto con la guerrilla) a los dos millones y medio de desplazados, aparte de haberse apropiado de 4 millones de hectáreas y haber ofrecido la devolución de 3.000 para reparar a las víctimas. Finalmente, respecto a París, espero veas los videos (varios) y los audios para que veas cómo la inexperiencia de una periodista bisoña, dio origen a una película de conspiraciones que jamás existió. Curioso momento éste del blanco y el negro, en el que estar en contra de uno de los enemigos, de inmediato lo coloca al lado del otro. Y en este momento, estar en contra de los paramilitares, es ser guerrillero, como a voz en cuello hoy lo repiten los áulicos de todos los pelambres para descalificar la marcha del 6 de marzo, tan válida como la del 4 de febrero, porque ambas buscan rechazar a los enemigos de Colombia que lo son todos, los farquientos, los paracos y los agentes estatales de la violencia. Un repaso de los fallos de las últimas dos décadas de la Corte Interamericana de Derechos humanos, en el que condenan al Gobierno colombiano por los crímenes de Estado, como el de hace poco por la matanza de La Rochela, es un repaso escalofriante que muestra el compromiso del Estado con estos crímenes abominables.
Alvaro:
El PDA no desaparecerá, como tampoco lo ha hecho el Partido Comunista o el Moir. Simplemente se reducirá a su mínima expresión, mientras sus mejores dirigentes partirán a fundar un nuevo partido de centroizquierda, lejano de los dogmas estalinistas.
Tequendamia:
??????
Mornátur:
Cierto. Una cosa es una cosa y otra cosa es otra cosa.
Tequendamia:
Infortunadamente para las Farc y también para los colombianos, aparte de un rincón en las noticias del 4 de febrero, la marcha contra las Farc sólo tuvo repercusión nacional y algún eco en los países vecinos. Y su comentario colocando a las Farc como “un importante actor en la geopolítica mundial” es tan cierto como el de la corresponsal de Telesur que habló de la gran marcha del PDA y la escasa participación de la real. Las Farc le importan un pito a España. Y el desplante de las Farc a la mediación española es el mismo que sufre una limusina cuando el pordiosero le echa la madre porque lo mojó con el charco.
viernes 15 de febrero de 2008, 16:30 COT
Marsares,
Pero ese madrazo del pordiosero le ha dolido en el alma a tu líder espiritual Álvaro Uribe, y ni modo de darle motosierra a las FARC.
viernes 15 de febrero de 2008, 16:38 COT
Por cierto, en Colombia matan pordioseros, para que los ricos que estudian medicina tengan cadáveres para hacer sus prácticas.
Parece que no te gustan los pordioseros. ¿Cierto? ¿Apruebas que los exterminen por el bien de esa profesión?
sbado 16 de febrero de 2008, 00:18 COT
Buen artículo. La marcha demostró que las farc son solo un puñado de bestias rabiosas sin espacio alguno, y que el Polo, visto como una oposición sin cabeza acertada (con las desastrosas actuaciones de Carlos Gaviria y Robledo), corre el riesgo de perder su espacio como fuerza de opinión, aunque tiene grandes líderes como el senador Petro y el papel que debe cumplir es imprescindible en una democracia: la sana oposición.
Con respecto a los comentarios… a las farc no les interesa la paz, son solo un grupo de narcos psicópatas escudados en premisas que dicen sentir pero que no ayudan a corregir. Acaso la desigualdad se acabará matando soldados y civiles indefensos? ilusos. la salida militar sigue siendo viable mientras las farc no hagan algo realmente coherente, como por ejemplo sentarse a negociar con una agenda seria, no con simples promesitas de agua de borrajas como nos la están planteando. En ese punto estaremos ante el fin de la Seguridad Democrática que aunque ha tenido sus éxitos, también ha cobrado errores.
sbado 16 de febrero de 2008, 00:22 COT
Y por lo visto, las farc están tratando de desagraviar a su aliado, el presidente Chávez, que debe de estar aún bastante dolido con la tremenda lección de comportamiento correctamente aplicada por el rey Juan Carlos. Pero con esos comportamientos de “le pegaste a mi amigui, no te quero” las farc solo demuestran su sesgo, que tarde o temprano los llevará no solo a la tumba ideológica en la que yacen hacen muchos años, sino a la real, cuando terminen de desertar sus pocos mamertos y militantes forzados.
sbado 16 de febrero de 2008, 04:41 COT
Coronel contreras,
Las marchas sólo demuestran lo frágil que son las masas, lo manipulable que es un pueblo que no ha recibido una buena educación, las consecuencias de mantenerlos en la ignorancia. La marcha sólo sirvió para demostrar por qué nos merecemos una dictadura narco-paramilitar y quizá algo peor si seguimos así y no abrimos los ojos. Y dios quiera que los abramos, porque sino nos va a caer un diluvio de mierda paramilitar y nos vamos a joder para siempre.
lunes 18 de febrero de 2008, 13:27 COT
Paul:
De acuerdo. A las FARC no les interesa la paz, por los menos a sus actuales dirigentes. Lo demuestran sus propios documentos en los que insisten en la toma del poder por medio de las armas. Negociación va a haber, pero no entre los actuales protagonistas. Los herederos de Marulanda y Reyes, y un presidente de la era post Uribe, firmarán la paz. Lo único que siento es que no va a ser fácil llevar a sus dirigentes a la Corte Penal Internacional para que los juzguen como criminales de guerra, lo propio que a los jefes paramilitares, que ahora buscan la extradición a los Estados Unidos para salvarse de la jurisdicción de la Corte.
jueves 21 de febrero de 2008, 01:55 COT
Nadie hace las paces con los pordioseros. Los siguen matando sin que nadie interceda por ellos. El autor de este articulo parece insinuar que ellos no valen como personas.