Davos y Nairobi, Frustración con F de Foro
Artículo destacadoPor Marsares
jueves 1 de febrero de 2007 19:25 COT
"Los que más recalientan el planeta están aquí, así que es normal que haya un poco de hipocresía y de buena conciencia". Así se expresó el fotógrafo francés de la Tierra Yann Arthus-Bertrand, uno de los 2.400 asistentes al Foro Económico de Davos que tuvo entre los temas principales de discusión la ecología y con ella el cambio climático. La localidad turística de los Alpes suizos puso su granito de arena a la polémica. Sus montañas no estaban tan cubiertas de nieve como en otras épocas. El invierno templado de este año lo impidió y de paso les demostró a los dirigentes políticos y privados que el efecto invernadero no sólo es una realidad, sino que nos cabe la responsabilidad a todos.
¿Pero algo se logró en Davos, aparte de las consabidas relaciones públicas? Como los años anteriores, donde la frustración fue la marca registrada del encuentro, en esta 36a. edición del foro fundado en 1970 por el profesor de economía Klaus Schwab, tampoco hubo caras alegres en la clausura. Para empezar, los principales contaminadores de la tierra, EUA, China e India, hicieron mutis en el Foro y apenas Bush prometió sustituir en los próximos 10 años la gasolina por etanol. ¿Influyó en esta vaga promesa el escándalo desatado en su país a raíz de las manipulaciones que ha hecho y sigue haciendo su administración de informes científicos sobre el avance del calentamiento global, para proteger a los poderosos, en especial a sus amigos petroleros de Texas?
También hubo otros temas que concitaron la atención de los presentes, sobresaliendo el del comercio, sobre el libre intercambio de bienes y servicios. Aunque hablar es desde ya una ganancia y se prometió revivir la llamada Ronda de Doha, a ver si después de 5 años se logra algún tipo de acuerdo, la Unión Europea y Estados Unidos continúan negándose a eliminar los subsidios a sus agricultores, exigiendo a las naciones en desarrollo que lo acepten sin discusiones. La clásica ley del embudo. Razón le cabe a Joseph Stieglitz cuando advierte que “No se les puede pedir a estas naciones que abran sus mercados sin nada a cambio”. Sí se puede, diríamos los colombianos. Para la muestra un botón, o mejor un tratado, el TLC con Estados Unidos, tan vergonzoso que hasta el mismo Partido Demócrata lo quiere revisar.
Paralelo a este Foro, como viene sucediendo desde hace 7 años, se reunió en Nairobi el Foro Social Mundial, donde las organizaciones sociales tienen la oportunidad de expresar sus propias inquietudes sobre la marcha de nuestro planeta. Cincuenta mil asistieron este año, según los organizadores, todos provistos de denuncias y análisis concienzudos de que este planeta es susceptible de arreglarse. Lo malo del cuento es que aquí estaban reunidos los que quieren hacer bien las cosas, pero no estaban los que las pueden llevar a la realidad, por lo que Nairobi queda en la historia como la constancia dejada por el resto de la humanidad sobre la destrucción de nuestro hogar.
Fue tanto el caos en Nairobi que la primera jornada se empleó en discutir si la entrada al foro debía seguirse cobrando. Al final los kenianos pudieron entrar libremente para conocer a los quijotes de la tierra y sus catálogos de buenas intenciones. Se habló mucho sobre las relaciones Europa-África; la deuda; la tierra; el SIDA; la lucha contra la miseria; y la misma existencia del Foro, “una fórmula que comienza a agotarse”, según el prestigioso intelectual Samir Amin. No extraña que el próximo año no esté planeado organizarse la 8a. versión y en su reemplazo se propongan múltiples encuentros a lo largo del mundo, coincidiendo con el de Davos.
¿Con tantos problemas por solucionar, vale la pena reunirse año tras año simplemente para conversar sin que nada se concrete? Parece que los asistentes al Foro Social Mundial lo entienden así y de ahí que la asamblea de movimientos sociales con las que culminó, haya urgido por un Foro con menos reflexiones y más acciones.¿Estrategia de algunos movimientos para fortalecer su propia agenda o simplemente deseos verdaderos de dejar tanta teoría y pasar a la práctica? Lo cierto es que el Foro Social culminó, como el de Davos, con las frustraciones de otros años, mientras la humanidad continúa con su cúmulo de problemas, aparentemente sin solución a la vista.
Quizás el único ganador de estas jornadas mundiales fue el ex campeón mundial de ajedrez Anatoli Karpov, quien en 45 minutos, en una simultánea, derrotó sin atenuantes a 25 asistentes a Davos. Muchos quisieran que los problemas se resolvieran de esta manera, o quizás reuniendo ambos foros como lo manifestó Peter Gabriel, porque como lo afirma Lula da Silva, "los que somos de izquierdas creemos que Davos está menos a la derecha, y los de derechas creen que Porto Alegre no está tan a la izquierda" . Todo el mundo quiere hacerlo, hasta Jim Morrison, que 35 años después de su muerte participará con uno de sus poemas en el lanzamiento de The Global Cool Campaign, cuyo objetivo es reducir en el mundo las emisiones de dióxido de carbono. Como van las cosas, necesitamos toda la ayuda posible, hasta la del más allá.
jueves 1 de febrero de 2007, 21:01 COT
Hola Marco:
Que buena y ante todo desapasionada reseña de dos eventos que en la apasionada Colombia pasaron casi inadvertidos.
Peter Gabriel, es de los pocos artistas serios y que no buscan lobby por sus intervenciones “políticas” sin dejar de lado su status como músico (a diferencia de Bono, Bob Geldof y Juanes, y con esto no quiero entrar en polémica, allá ellos), con una postura clara y sin ningún compromiso comercial. Sin embargo es muy difícil que se den las cosas como muestra la tendencia actual.
El problema radica en el cambio hacia una clara posición política, y a nivel general de ética, como lo he venido comentando en torno al problema del cambio climático.
Un abrazo!
viernes 2 de febrero de 2007, 15:58 COT
Excelente reseña, maestro Marsares. Otro abrazo.
viernes 2 de febrero de 2007, 16:15 COT
Considero grave que la inutilidad de ambos foros sea cada vez más evidente y es una lástima que estos espacios se desperdicien así.
Un saludo. Encuentro mejor información acá que en los medios tradicionales. Buena esa.
sbado 3 de febrero de 2007, 11:27 COT
Germán:
Sorprende sobremanera que Davos y Nairobi hayan sido casi ignorados en nuestra parroquia en momentos que el mundo debate los informes cientìficos que confirman la acción del hombre en el cambio climático. Por fortuna, tanto tú como Thilo han ilustrado a los lectores de equinoXio sobre la depredación de la naturaleza y sus alcances. Respecto a Peter Gabriel, como bien lo afirmas, es una de las voces musicales independientes que generan autoridad en el mundo.
Alvaro:
Ambos en la jugada.
Carlos
Poner de acuerdo a los poderosos por encima de sus intereses, es toda una proeza. Y mucho más a los pobres, cuyos múltiples problemas impiden el consenso salvador.
lunes 5 de febrero de 2007, 11:10 COT
Bien podría titularse este artículo “El otro Kyoto”. Aunque la reunión “tercermundista” no haya rendido frutos, es importante que exista la iniciativa para reunirse y conocerse, y quizás ir abonando el terreno político para que llegado el día, las negociaciones para conservar lo que quede aún del planeta, no sean tan ventajosas para países poderosos que no asistieron. Yo lo veo como una especie de cumbre de “No alineados” por el planeta. Interesantes las conclusiones geopolíticas, aunque espero que no sean tan desgarradoramente ciertas.
viernes 9 de febrero de 2007, 15:48 COT
[…] En "Davos y Nairobi, frustración con F de Foro", resaltaba el desencanto que produjo el desenlace de los dos encuentros pero, igualmente, tenía en cuenta la presencia de personajes como el cantante Peter Gabriel, cuyo afán no es el protagonismo sino la defensa de los derechos humanos. […]
martes 19 de junio de 2007, 06:23 COT
[…] consolidar sus ventas de discos. Caso contrario a personajes del talante de Peter Gabriel, quien ha demostrado que su afán activista no es de protagonismo, sino de real compromiso. Ojala un tipo como Gabriel […]