Saldo en rojo
Columnas > Eco-grafíasPor Germán A. Quimbayo
martes 7 de octubre de 2008 16:34 COT
Qué pena ser tan cansón con el tema, pero quiero insistir en la verdadera función que deben tener los medios de comunicación en temas primordiales para la sociedad. En vez de informar y brindar herramientas para que la sociedad por sí misma se cuestione y tome acciones concretas para transformar su realidad, se promueve una propaganda del consumismo y de la violencia, que reafirman comportamientos y actitudes que van en contravía del mínimo respeto hacia la vida.
Mientras el mundo financiero se resquebraja y en Colombia se incuba una sociedad cada vez más violenta (en todo sentido), el mundo sigue girando y los comportamientos del ser humano cada vez más afectan al resto de seres vivos con los que convive el Planeta. Pues resulta que desde el pasado 5 de octubre y hasta el próximo día 14, se está desarrollando el Congreso Mundial de la Naturaleza de la UICN (Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza) en Barcelona, España. Dicho Congreso se lleva a cabo cada cuatro años desde 1948, y pienso que es un evento trascendental que todas las personas del mundo, desde el tomador de decisiones hasta el ama de casa, deberían seguir con interés y atención.
Lastimosamente este evento ha pasado desapercibido para los medios de comunicación y la opinión pública en general, pese a que la UICN ha dispuesto de una interesante estrategia de comunicaciones que en países como Colombia no ha tenido mucha resonancia. ¿Qué resonancia va a tener, cuando la propaganda sirve para mostrar shows de buenas intenciones y no acciones serias frente a la conservación del patrimonio ecológico del país? Pero ya mucho se ha hablado al respecto y no me gustaría profundizar en ello. Me gustaría comentar más bien algunas cosas que me han venido llegando desde ese evento, las cuales sería interesante compartir y difundir.
El mencionado congreso tiene un carácter no solo de encuentro y punto de discusión, sino que tiene un carácter decisorio para emprender estrategias y líneas de acción frente a la conservación de la naturaleza en todo el Globo. Es por ello que a él asisten toda la gama de representantes en el mundo de la conservación y el ambientalismo, desde autoridades académicas y científicas, organizaciones no gubernamentales, representantes gubernamentales, y ambientalistas en general. Llama también la intención y coherencia del congreso frente a los impactos ambientales y “huella ecológica” que suele dejar este tipo de eventos, por lo cual se ha desarrollado un protocolo “verde” para el desarrollo del congreso.
Pese a llevar pocos días, el evento ya generó sus primeros hitos. En el marco del evento se ha revelado la famosa Lista Roja de Especies Amenazadas que maneja la UICN, publicada cada cuatro años, precisamente cada vez que sesiona el Congreso Mundial de la Naturaleza. En el mundo de la conservación, la Lista Roja es un instrumento que clasifica a las especies en función de su riesgo de extinción. Su objetivo principal es identificar y documentar las especies que requieren medidas de conservación prioritarias y establecer un índice del estado de la biodiversidad. Maneja una base de datos sobre el estado global de aproximadamente 45.000 especies.
Con fines ilustrativos la UICN maneja las siguientes categorías para la Lista Roja de Especies Amenazadas, por orden descendente de amenaza: extinto o extinto en estado silvestre; en peligro crítico de extinción; en peligro y vulnerable; casi amenazadas; preocupación menor; datos insuficientes y en peligro crítico (posiblemente extinta). Para mayor información respecto a la lista roja, pueden visitar estos enlaces: (1, 2, 3).
Gráfico de la Estructura de Categoría de la Lista Roja (Fuente: UICN-Lista Roja-Comisión de Supervivencia de Especies. 2008)
Según un boletín de prensa de la misma UICN, la presentación de la Lista Roja para este año, arrojó algunas cifras preocupantes para muchas especies, pero marcó diferencia el estudio hecho hacia los hacia los mamíferos.
Textualmente dicho boletín de prensa menciona los siguiente:
“Uno de cada cuatro corre el riesgo de desaparición total. El nuevo estudio muestra que por lo menos 1.141 de las 5.487especies de mamíferos de la Tierra están amenazadas de extinción. 76 especies por lo menos se han extinguido desde 1500. No obstante, los resultados muestran también que determinadas especies que se encuentran al borde de la extinción pueden recuperarse; el 5% de los mamíferos actualmente amenazados muestran señales de recuperación en estado silvestre. La situación real podría ser mucho peor, dado que 836 mamíferos se encuentran en la categoría “datos insuficientes”. Con más informaciones, podría comprobarse que hay más especies en peligro de extinción”.
Lastimosamente la mayoría de los mamíferos, especialmente los de gran tamaño, debido a sus requerimientos ecológicos y de hábitat, son las primeras víctimas que cobra el daño que hace otro mamífero, gracias a la transformación y perturbación ecosistémica que hace el ser humano, preferiblemente para establecer actividades agrícolas, extractivas y de urbanización. Obviamente por su tamaño y “carisma” (paradójico esto), también son víctimas de la caza indiscriminada y el tráfico ilegal.
Algunos estudios [ver referencias bibliográficas al final del presente artículo] revelan que hoy por hoy países como Colombia (que para el caso de este país más de la tercera parte de la superficie del país presenta niveles de transformación altos de sus ecosistemas) presentan cuatro procesos principales de transformación del uso del territorio y los ecosistemas: 1) la expansión de la frontera agropecuaria; 2) la intensificación de la agricultura en sectores de alta productividad y acceso; y 3) la urbanización. Un cuarto proceso, 4) abandono de tierras marginales apenas empieza. Dicha transformación afecta directa o indirectamente a la biodiversidad, en especial de especies de mamíferos. Eso sin sumar el efecto que tiene la caza indiscriminada y el comercio ilegal de especies.
Definitivamente nuestro desconocimiento como ciudadanos frente a estas dinámicas puede estar representando un “saldo en rojo” para la conservación de la vida, incluyendo la nuestra. Debo confesar mi amor por los mamíferos (especialmente los primates), pero debemos ponerles atención a todas las especies y organismos vivos que estén en amenaza de extinción, pues más allá del valor que represente la sola existencia de estos organismos, ellos cumplen roles y funciones en los ecosistemas que son fundamentales para el mantenimiento de estos últimos.
Los mamíferos en especial, por solo poner un ejemplo, son consumidores y dispersadores de semillas de muchas especies vegetales que mantienen los bosques y selvas, mientras que los carnívoros mantienen el equilibrio poblacional de otras especies en el ecosistema. Si logramos entender todo esto en conjunto, la buena salud ecosistémica representa una buena salud humana, pues nuestras sociedades dependen y se construyen a partir de los recursos que estos nos brindan.
Por acá les dejo varios videos de un recurso que acabo de encontrar llamado Arkive, respaldado por la misma UICN, sobre documentación gráfica y visual de vida sivestre en el Globo. Lo recomiendo mucho.
(Pista: ambas son especies endémicas de Colombia y presentan amenaza de extinción)
Arriba: Tapirus pinchaque; abajo: Saguinus oedipus
Un saludo.
Información congreso y lista roja vía UICN
Bibliografía relacionada:
Etter, A. & A. Sarmiento. 2008. La reconfiguración del espacio rural en Colombia: entre la deforestación para la expansión de la frontera agropecuaria y la intensificación de la agricultura. Ponencia para el Seminario Internacional “Las Configuraciones de los Territorios Rurales en el Siglo XXI” 24 – 28 de marzo de 2008.
Etter, A., C. McAlpine, K. Wilson, S. Phinn, and H. Possingham. 2006. Regional patterns of agricultural land use and deforestation in Colombia. Agriculture, Ecosystems and Environment 114: 369-386.
martes 7 de octubre de 2008, 19:24 COT
Hola German!!
El valor que tiene este Congreso de Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza, es altísimo; es nuestro propio existir y el de las futuras generaciones. Falta conciencia y esto es inquietante. Estoy por creer algo preocupante: ¿Será que los medios al igual que los políticos sólo se están pronunciando a favor de los intereses del ecosistema y del medio ambiente, tan sólo por esnobismo o por intereses publicitarios para el manejo de su perfil? Me temo que es así, de lo contrario. no se justifica que, cada que acontezca algo delicado sobre el tema sostenible, todos se pronuncien en la conservación de nuestro propio sustento natural. Pero no, todo queda más tarde.
Hoy sí digo, como decía un profe: “Tan siquiera se murieron mis abuelos”.
Ya va siendo hora de reaccionar y ayudar a que esos indicadores que citas, no se terminen de desmoronar.
¡Un abrazo natural, alegre y saludable!
viernes 10 de octubre de 2008, 13:41 COT
Preocupante situación Germán…la pregunta ¿qué hacer? ¿Podemos pensar en algo para echarlo a andar?
viernes 10 de octubre de 2008, 20:56 COT
Lully
Gracias por tu comentario. Precisamente eso es lo que he venido sosteniendo en esta instancia desde hace rato. Igual, no se debe entrar en catastrofismos y alarmismos, pues también es contraproducente. Simplemente se debe resignificar como debe ser a la vida por su simple existencia y de eso depende de la actitud que toda la sociedad tenga respecto a este tema. Saludos.
Bailarina
Pues, quizá lo mismo que le digo a Lully, volver al sentido común de comprender las dinámicas ecológicas, más que ellas se tengan que comportar como nosotros queramos que lo hagan. Un saludo.