Dios no lo quiera
impuesto de guerraPor Sentido Común
sbado 10 de diciembre de 2005 9:19 COT
Colaboración de Olga Rodríguez
Muere Álvaro Uribe y Dios y el Diablo se pelean, porque ninguno de los dos lo quiere recibir. En vista que ninguno cede y no hay acuerdo, recurren a mediadores. Estos deciden una propuesta de aceptación obligatoria: que alterne un mes en el cielo y otro en el infierno.
El primer mes Uribe va al cielo. Dios no sabe qué hacer, se vuelve loco: El paisa le da vuelta a todo. Espía los elementos de la oración y la liturgia. Disuelve el sistema de asesoría personal de los ángeles. Subasta las nubes. Le regala un kilómetro cuadrado de cielo al infierno. Declara un ultimátum a los ángeles guardianes de elite que no registren resultados contra el satanismo. Nombra arcángeles paramilitares. Allana el purgatorio, coloca una brigada antiterrorista a la entrada del cielo, para controlar la llegada de colombianos. Establece un bloque de búsqueda elite para buscar a un alias Chucho. Plantea una reforma a los estatutos celestiales para quitarle la denominación al hijo de Dios como Mesías y se propone transformar la trinidad en una tetranidad, padre, hijo, espíritu santo y el neo Mesías Uribe. No contento con lo anterior propone un referendo como candidato a Dios único reelegible y metainfinito. Les interviene las comunicaciones a los Santos. Cambia las guardas de las chapas de las puertas de San Pedro y le incauta las llaves. Envía un proyecto de ley a los apóstoles para reformar los Diez Mandamientos y darle amnistía a Mancuso y sus muchachos. Organiza consejos comunitarios para debatir quiénes deben ir al cielo. En el cielo todo es privatizado. La gente, los ángeles y los santos no lo soportan, se tapan los oídos cuando habla, pues no saben si está llorando o está cantando. Dios no ve la hora que se cumpla el día 30 para que se largue al infierno.
Cuando Uribe va al infierno, Dios respira aliviado. Pero al acercarse el día 20, comienza a sufrir nuevamente, pensando en que 10 días más tiene que volver a verlo. Sin embargo llega el primer día del siguiente mes y nada. El quinto día y nada, no aparece. Primero Dios estaba feliz, pero luego se quedó pensando, que acaso se haya quedado más tiempo en el infierno y luego pueda tocarle dos meses seguidos en el Paraíso. Con sólo pensarlo se desespera, y Dios decide llamar por teléfono al infierno para preguntarle al diablo ¿qué es lo que ocurre? ¡¡¡Ring…ring…ring!!! Contesta un empleado y Dios pregunta:
– Por favor, ¿me puede comunicar con el Demonio?”
– ¿Cuál de los dos? – contesta el empleado – ¿el colorado con cuernos o el paisa hijo de put@?
martes 13 de diciembre de 2005, 22:25 COT
Ole señor… jajajajaja
Buen pero buen chiste.
¡Quien ve al carajito del Uribe!
Gracias por las visitas.
Saludos!!!
jueves 15 de diciembre de 2005, 08:41 COT
¿Chiste?
mircoles 22 de febrero de 2006, 04:33 COT
Hola que increible foto pues es que es muy precisio todo!! me encanto y tus posts estan interesantes pues la coolombia esta lleno de politiqueria y de esperanzas pero de lo que paso con los soldados colombianos eso si no hay derecho que inhumanois son esos del ejercito!! bueno te invito ami blog para compartirlo con vos ve! un saludo desde el 1/2 oriente http://www.birmaher.blogspot.com
nos hablamos!!!