Finales adelantadas
Columnas > Con los taches arribaPor Rafa XIII
martes 10 de julio de 2007 16:09 COT
Tres de los cuatro resultados de los partidos de cuartos de final de la Copa América Venezuela 2007 puede decirse que se ajustan a la lógica histórica de este torneo, en sus 91 años de existencia. Las semifinales Uruguay-Brasil y Argentina-México son verdaderas finales adelantadas.
Era lógico que Uruguay, con todo y lo venido a menos que ha estado el fútbol charrúa en las últimas dos décadas, le ganara al anfitrión Venezuela, que a pesar de sus progresos y de un calendario hecho a su medida por ser el país organizador del certamen, se sabía que en cualquier momento iba a desfallecer. El 4-1 puede parecer escandaloso, porque los Patriotas dieron la pelea en el primer tiempo, pero la magia de Forlán, que recordó sus grandes momentos en Independiente y en el fútbol inglés trajeron de nuevo a la memoria aquellas gestas heroicas del fútbol uruguayo.
Brasil se destapó ante Chile. No es un equipo con todas las estrellas. Es más bien un combinado mixto, porque históricamente los brasileños no es que le hayan parado muchas bolas a la Copa América, a tal punto que solamente han ganado en siete ocasiones, mientras que, por ejemplo, los argentinos y uruguayos lo han hecho en 14 oportunidades, por lo que ha hecho carrera la frase aquella de “argentinos, ustedes ganen la Copa América, que nosotros ganamos los mundiales…” Por otra parte, veo uno que un equipo liderado por Robinho, Diego, Elano y Vagner le pasa por encima a Chile, lo que inmediatamente se le ocurre preguntarse es qué pasaría su hubieran jugado monstruos como Kaká, Adriano, Ronaldinho e incluso el gordo Ronaldo (que a pesar de no estar en su mejor forma, mete miedo). ¿Terminaría 10-0 el partido?
Argentina tiene un combo de nombres: Cambiasso, Tévez, Messi, Riquelme, Aimar, Verón, Crespo, Zanetti, Mascherano, etc… Es inconcebible jugar mal con semejante plantilla. Los peruanos tenían una misión casi imposible. Si se dedicaban a defenderse, tarde o temprano, como sucedió, los iban a llenar, porque no se puede aguantar noventa minutos metido debajo del arco y dejándole la pelota al rival. Y si atacaban, peor, porque los mataban en el contragolpe. A Uribe, como pasa con su tocayo colombiano de apellido, le iban a dar garrote porque sí y porque no.
Y México… Ni el más optimista de los manitos se imaginaba semejante marcador. Sobre el papel, el duelo con Paraguay era la llave más pareja, pero todo se fue al piso con la expulsión del arquero Bobadilla. No es que México no hubiera podido ganarle a Paraguay, lo que lo hace anecdótico es la manera en que lo logró, con un contendor guaraní destrozado. Si en igualdad de condiciones, un equipo mexicano con Cuauhtémoc Blanco, Adolfo “El Bofo” Bautista, Omar Bravo, Juan Cacho y Gerardo Torrado es combativo durante todo el cotejo, si se les llega a dar la ventaja de poner a un arquero frío y marcar un gol al primer minuto, hay que darse por muerto.
¿Quiénes serán los finalistas? A los ojos de la mayoría, lo lógico, lo normal y lo que es de esperarse es que se dé una final Brasil-Argentina… Ambos quieren que esto se cumpla. Los brasileños para retener el título y los argentinos para sacarse el clavo de la final de Perú 2004, cuando hasta el último minuto del tiempo de descuento, los albicelestes ganaban 2-1. El empate de Adriano forzó la definición por penales, en donde D’Alessandro y Heinze fallaron sus cobros. Los cariocas se alzaron con el triunfo por 4-2.
Lo anterior no significa que México y Uruguay no tengan nada que hacer. Uruguay siempre se juega el partido de la vida frente a Brasil, y si no gana, al menos muere con las botas puestas, ya sea en los pies o en la canilla de sus oponentes. México no es ningún invitado de relleno en los torneos de Conmebol. Ya fue subcampeón de esta copa en el 93 y en 2001, así que no se conformarán con menos del título. En competencias de clubes como la Libertadores y la Suramericana, nos han demostrado que no solamente compiten, sino que ganan. Además, el duelo México-Argentina tiene el morbo del último partido mundialista entre ambos equipos, por octavos de final en Alemania 2006, cuando los argentinos eliminaron a los mexicanos en tiempo suplementario.
Obvio que nadie da un peso por una final México-Uruguay, pero es posible que alguno de los dos, por esas cosas del fútbol se interponga en el camino de alguno de los dos favoritos. Lo que sí es seguro es que acá ya no habrá las estruendosas goleadas de cuartos de final, pero están garantizados el drama, el nerviosismo y la adrenalina de estas instancias de muerte súbita.
martes 10 de julio de 2007, 19:04 COT
Una nómina muy fortalecida la de Argentina que dará junto con Mexico una final adelantada. Esperemos que el juego de Brasil y Uruguay también sera bueno.
Un balance de Copa América con muchos goles y, maravilloso que se hubiese hecho en Venezuela para crear más amigos de este deporte en ese vecino país. De hecho se le ha visto el progreso a este nivel.
Un abrazo equinoXial para tí Rafa!
U
mircoles 11 de julio de 2007, 09:54 COT
Razón tenían los uruguayos en quejarse por la designación de Oscar Ruiz como árbitro. En el lanzamiento decisivo, el arquero brasilero Doni casi llega junto a los pies de Lugano para taparle el cobro. Al margen de esto, el pobre Forlán debió experimentar en carne propia lo que le aconteció a Roberto Baggio en la final de USA 94.
lunes 16 de julio de 2007, 15:03 COT
[…] Finales adelantadas […]