El negocio de la salud
Columnas > El psicoscopioPor Javier Akerman
lunes 2 de junio de 2008 17:38 COT
La mayoría de la población cree que su salud está en buenas manos. Cree a pies juntillas lo que los organismos sanitarios nos dicen acerca de las enfermedades y de las diversas formas de combatirlas. Nos han adoctrinado a creer en dogmas que no pueden ser puestos en tela de juicio, pues los pocos que así lo han hecho han visto sus carreras profesionales arruinadas. La nueva Inquisición sanitaria, amparada por las multinacionales farmacéuticas, no permite que nadie pueda sacar a la luz sus negocios mafiosos y los oscuros intereses que se esconden detrás de sus infranqueables muros.
Han exterminado toda competencia. A los investigadores médicos se les “orienta” y los disidentes son encarcelados y sus voces reducidas al silencio. Los posibles productos alternativos naturales que pudieran hacerles la competencia han caído en sus manos gracias a la denominada legislación Codex de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y a las patentes de la Organización Mundial del Comercio (OMC).
Los gobiernos y los medios de comunicación se ocupan de influir sobre la población alimentando el miedo a la enfermedad. Se manipulan los genes, se patenta toda forma de vida, se comercia con órganos, se irradian alimentos, se pasteuriza la leche, se imponen obligatoriamente más de treinta vacunas desde la infancia… y mientras tanto los costes suben y las multinacionales se enriquecen a costa de nuestra salud y obligándonos a un silencio selectivo.
Detrás están las grandes corporaciones bancarias, políticos con enormes sumas de dinero invertidas en acciones de los laboratorios farmacéuticos, como es el caso de Donald Rumsfeld, antiguo secretario de Defensa de los EUA, accionista de la compañía farmacéutica Gilead, la creadora de Tamiflu para la gripe aviar. Robert Zoellick, a quién el propio George W. Bush propuso para presidir el Banco Mundial, ha sido un buen amigo de la industria farmacéutica, como se ha publicado. Associated Press difundió que Karl Rove, el asesor más poderoso de Bush, ya dimitido, tenía un cuarto de millón de dólares en acciones de la farmacéutica Johnson & Johnson. Como puso de manifiesto el periodista Miguel Jara, gracias a la Ley de Acceso a la Información de USA, sabemos qué compañías farmacéuticas ofrecen dinero a qué candidato electoral de aquel país cada vez que hay elecciones, y qué cantidad (enormes cantidades). Luego los ganadores devuelven los favores con leyes hechas a la medida de estas corporaciones o con decisiones que las favorecen. Además, el Gobierno de EUA actúa como representante comercial de las farmacéuticas estadounidenses en los foros globalizadores, como en las reuniones de la Organización Mundial de Comercio (OMC), en la que presiona a favor de las leyes internacionales de patentes. Hoy el dinero de los laboratorios farmacéuticos financia las campañas electorales en EUA y supone el 70% de los ingresos de la FDA, la agencia de medicamentos estadounidense, una institución pública.
Y en Europa ocurre algo parecido. Por ejemplo, en un Congreso Médico las presentaciones y ponencias que aparecen en tales eventos están controladas y requieren obligatoriamente ser primero aceptadas por el "comité científico" organizador del congreso. ¿Y quién designa a ese comité científico? Pues generalmente quien financia el evento: la industria farmacéutica. ¡Si, hoy son las multinacionales las que deciden hasta qué se enseña a los futuros médicos en las facultades y qué se publica y expone en los congresos de medicina! El control es absoluto, una dictadura sanitaria que nos afecta a todos, incluso a los propios médicos que no tienen acceso a otra fuente de información que no sea la proporcionada por las industrias del sector.
El negocio de la salud
El dinero controla totalmente la Medicina. Y lo único que de verdad interesa a quienes manejan este negocio es ganar dinero. ¿Y cómo ganar más? Pues haciendo que la gente esté enferma… porque las personas sanas no generan ingresos. La estrategia consiste, en suma, en tener enfermos crónicos que tengan que consumir todo tipo de productos paliativos, es decir, para tratar sólo síntomas; medicamentos para aliviar el dolor, bajar la fiebre, disminuir la inflamación… pero nunca fármacos que puedan resolver una dolencia. Eso no es rentable, no interesa. La medicina actual está concebida para que la gente permanezca enferma el mayor tiempo posible y compre fármacos; si es posible, toda la vida. Y esto lo ratifican muchos médicos, como la Dra. Ghislaine Lanctôt, médica residente en Canadá a la que se le retiró la licencia para ejercer por oponerse a las manipulaciones de los multinacionales “farmafiosas” y denunciar todos estos atropellos. Ellos controlan absolutamente todo: medios de comunicación, organismos oficiales y la propia opinión pública. A quien se atreva a disentir se le difama públicamente, se le arruina su carrera profesional y se le aparta de la sociedad como a un paria.
Mártires de la "farmafia"
Nombres como Mirko Berljanski, que trabajó en el Instituto Pasteur de Francia bajo la tutela de un premio Nobel, o como el Dr. Duesberg, eminente investigador de inmunología de USA. A ambos se les cerró su laboratorio y se les prohibió seguir investigando otras alternativas al SIDA porque se alejaban de la “sacrosanta” verdad oficial. Los que quieren ayudarnos son condenados por charlatanes, y los verdaderos charlatanes, los mafiosos de la salud, gozan de todos los privilegios y se llenan los bolsillos a costa de nuestras enfermedades. Nuestro silencio ante esos atropellos nos mata y empobrece, además de ser un atentado a los derechos humanos.
La paradoja es que cuando un médico utiliza terapias alternativas o no convencionales se le acusa y lleva a los Tribunales por practicar “tratamientos no médicos”, pero cuando un terapeuta no médico utiliza las mismas terapias se le acusa de “ejercicio ilegal de la medicina”. ¡La más absoluta y delirante falta de lógica! Y detrás está apuntando a la nuca la difamación, como arma a utilizar contra los disidentes. En España, a cada momento, saltan a los medios de comunicación campañas de intoxicación y difamación contra las terapias o los productos naturistas, orquestadas y financiadas por los organismos sanitarios públicos y privados que a su vez son dirigidos por las multinacionales farmacéuticas. Vale recordar el caso acerca del Bio-Bac, con una intervención policial de alto nivel; ya podían usar la misma fuerza contra los carteles de la droga. Y todo eso para después demostrar que dicho producto natural era inocuo y había ayudado a aliviar el dolor y el sufrimiento a enfermos desahuciados de cáncer y otras enfermedades degenerativas. Más de una docena de médicos tratados como delincuentes y enjuiciados en los medios de comunicación para mayor escarnio público, y después…el silencio mediático.
En USA otro caso indignante fue el del Dr. Halstead, un médico de California de gran reputación al que se le retiró la licencia para ejercer e incluso ¡se le prohibió afirmar en público que había estudiado medicina! Cinco años de cárcel por tratar a algunos pacientes de cáncer con unas hierbas medicinales que se trajo de Japón. No hubo muertes ni denuncias por parte de sus pacientes. El crimen de este doctor fue apartarse de los tratamientos oficiales del cáncer: quimioterapia, radioterapia y cirugía. Se le ha prohibido incluso dirigir un Instituto de Investigaciones Oceanográficas que no tiene fines lucrativos ni relación con la medicina. ¡Viva la justicia!
En definitiva, y tal como denunció la Dra. Lanctôt, el llamado sistema sanitario es en realidad un sistema de enfermedad. Se practica una medicina de la enfermedad y no de la salud. Una medicina que sólo reconoce la existencia del cuerpo físico y no tiene en cuenta ni el espíritu, ni la mente, ni las emociones. Y que además trata sólo el síntoma y no la causa del problema. Se trata de un sistema que mantiene al paciente en la ignorancia y la dependencia, y al que se estimula para que consuma fármacos de todo tipo.
El médico es -muchas veces de forma inconsciente, es verdad- la correa de transmisión de la gran industria. Durante los 5 a 10 años que pasa en la Facultad de Medicina el sistema se encarga de inculcarle unos determinados conocimientos y de cerrarle los ojos a otras posibilidades. Posteriormente, en los hospitales y congresos médicos, se les refuerza en la idea de que la función del médico es curar y salvar vidas, de que la enfermedad y la muerte son fracasos que debe evitar a toda costa y de que la enseñanza recibida es la única válida. Además se les enseña que el médico no debe implicarse emocionalmente y que es un "dios" de la salud. De ahí que incluso exista caza de brujas entre los propios profesionales de la medicina. La medicina oficial, la "científica", no puede permitir que existan otras formas de curar que no sean serviles al sistema. Al paciente no se le deja elegir la forma en que quiere ser tratado, se le obliga y condiciona para que no se aparte de la senda oficialmente establecida.
Queridos lectores de equinoXio, no comulguemos con ruedas de molino. Exijamos el libre acceso a la información y a que respeten nuestras decisiones y la libertad de elección. Reflexionemos sobre los intereses que se nos ocultan y aprendamos a leer “entre líneas” y a ser críticos con la información que cotidianamente nos satura los sentidos. En otros artículos seguiremos hablando sobre estos temas, pues hay todavía mucho que decir.
lunes 2 de junio de 2008, 18:12 COT
El tema del articulo es una verdad que todos sabemos, como tambien sabemos que la verdad se manipula en todo el mundo. Colombia no es la excepcion. Saben? Ojala sigan asi porque yo me canse y habia dejado de lado muchas cosas por escribir sobre estos temas a los cuales la gente es sorda y ciega.
Ojala sigan asi.
saludos. Oswaldo
http://proyectofuturo.wordpress.com
martes 3 de junio de 2008, 02:25 COT
Estimado Oswaldo:
Lo importante es seguir informando. Y yo lo seguiré haciendo de forma periódica.
Gracias por sus ánimos.
Un cordial saludo.
martes 3 de junio de 2008, 02:34 COT
Si yo hace once años (ahora tengo 58) hubiera sabido cuánto pública Miguel Jara en sus libros, conferencias etc., yo me hubiera, informado muy y mucho sobre los medicamentos, ignorante de mi, creia que mi gobierno España, vigilaba y controlaba los medicamentos por la salud de sus ciudadanos.
Lo puedo decir desde mi tristeza, mi gobierno me enfermo de por vida, por tomar el medicamento Agreal para los sofocos de la menopausia, un antipsicótico que tomé durante 8 años, recetado por mi ginecóloga.
Era una mujer muy sana, trabajadora, esposa y madre ¿ahora que soy?
Una enferma con el Sistema Central Nervioso, totalmente deteriorado, con los daños colaterales que por mi enfermedad, he y estoy ocasionando a mi familia.
¿Qué hace ahora mi gobierno en este asunto del Agreal, ya no solo por mi sino por miles de mujeres en toda España? Mira hacia otro lado, al igual que los Laboratorios Sanofi Aventis.
¿Porqué no quieren pronunciarse ni Ministerio de Sanidad ni Sanofi Aventis, aqui en España de los graves daños e incluso irreversibles que nos ha dejado el Agreal?.
Pues porque en 22 años que estuvo autorizado, NUNCA fué este medicamento, ni controlado por Farmacovigilancia, Agencia del Medicamento y Sanofi Aventis.
Tienes razón Migual Jara, prima más los intereses de la Industria Farmaceutica, que la salud del ser humano.
martes 3 de junio de 2008, 08:36 COT
Estimada Paqui:
Siento todo lo que le ha ocurrido, al igual que a muchos enfermos más. Por eso publicamos estos artículos, pues la mejor medicina es la información.
Reciba un cordial saludo.
martes 3 de junio de 2008, 08:42 COT
El negocio de la salud…
La mayoría de la población cree que su salud está en buenas manos. Cree a pies juntillas lo que los organismos sanitarios nos dicen acerca de las enfermedades y de las diversas formas de combatirlas. Nos han adoctrinado a creer en dogmas que no pued…
martes 3 de junio de 2008, 11:31 COT
supongo que la industria farmacéutica tiene mucho que ver con la demonización de las llamadas terapias alternativas… que en realidad son anteriores a la medicina oficial… y en muchos casos más efectivas
un abrazo
martes 3 de junio de 2008, 12:45 COT
Estimado Camille:
Efectivamente, la demonización de las Terapias Alternativas procede de la industria farmacéutica en su mayor parte, porque ve peligrar una parte importante de su negocio. Existen además grupos de presión financiados por estas industrias. Yo siempre he defendido que las Medicinas o Terapias Complementarias (prefiero ese término a “alternativas”) y la Medicina tradicional deben trabajar juntas a favor del enfermo y en un modelo integrador cuyo objetivo debe ser la salud.
Un cordial saludo.
martes 3 de junio de 2008, 23:41 COT
Y qué de la Celuloterapia? Entiendo que hay un Instituto en Suiza del ya fallecido Profesor NIEHAMS.Quisiera una ampliación del tema,de ser posible.Despues de vuestra respuesta les agregaré interesantes datos personales.El Instituto es muy famoso y van muchos artistas y otras personalidades de mucha importancia para ser atendidos en el propio Instituto. Creo que Iofilizan las medicinas a base de celulas vivientes de corderos y otros animales.
Agradeciendo su atención les felicito por la forma sincera ,realista y sencilla con que abordan los temas.
mircoles 4 de junio de 2008, 09:13 COT
Estimado Alfonso:
Ante todo gracias por su felicitación.
La celuloterapia es un protocolo terapéutico que utiliza células fetales o embrionarias de animales (el cordero es el preferente) y cuyo objetivo es desacelerar el envejecimiento, aunque también se utiliza para ciertas enfermedades degenerativas.
Esta forma de terapia fue inicialmente introducida por el médico suizo Paul Niehans, muerto en 1971. Posteriormente fue difundida por el médico alemán F. Schmid y hoy en día se utiliza en Suíza, Alemania, Austria y USA, a pesar de la polémica que despierta entre los investigadores y los elevados precios de la misma.
Reciba un cordial saludo.
mircoles 4 de junio de 2008, 10:34 COT
Es extraño,que en una sociedad con todos los posibles elementos de comunicacion y de critica;la mano manipuladora de todos los elementos que se disponen para la salud sean mas para lo estetico e intrasendente que para lo verdaderamente patologico.
Estamos en la contradiccion de una falsa potencialidad de la medicina occidental y su infinita solucion a todo problema o de ser complementaria a los medios y metodos de la llamada alternativa.
Somos los medicos que perdimos la ruta y el sentido sobre los procesos patologicos y nos entregamos a los falsos descubrimientos y terapeuticas sobre las enfermedades inesistentes o de mantener en vida a todos los seres que llamamos en fase terminal para darles una migaja de vida con cirugias extremas,quimioterapias toxicas o radioterapia de accion pasajeras que no afectaran el proceso biologico.
Ese medico critico que unia su conocimiento terapeutico al lado de una ayuda complementaria de la farmacia son cultos del pasado.Ahora solo son 15 minutos para definir todo un acto medico,donde queda todo enmarcado y donde la enfermedad es otro articulo de consumo que se compra y se vende segun el postor.
Somos nosotros los medicos tambien parte de esa telaraña de traficantes que por perder la grandiosidad del misterio de la vida y la muerte,ahora los intemediarios de la salud y de las drogas nos hacen invisibles.
mircoles 4 de junio de 2008, 14:55 COT
Estimado fransj:
Su comentario es una magnífica y crítica reflexión sobre lo que he escrito en mi artículo, reflexión que comparto totalmente.
Gracias por su acertado análisis.
jueves 12 de junio de 2008, 11:32 COT
Javier, me ha llegado este artículo tuyo por correo. Felicitarte y agradecerte que me hayas citado, así como que hayas utilizado parte de la foto de la portada de mi libro Traficantes de salud para ilustrar tu info.
He publicado parte de tu información en mi blog: http://migueljara.wordpress.com/ultima-hora/
Cuando necesites la foto completa o cualquier cosa ya sabes.
Un abrazo.
Y gracias Paqui por acordarte de mí.
jueves 12 de junio de 2008, 13:32 COT
Estimado Miguel:
Gracias a ti por ser una persona valiente, íntegra y clara a la hora de abordar esta realidad “oculta”.
Un fuerte abrazo,
Javier Akerman
sbado 5 de septiembre de 2009, 10:24 COT
Farmafia: La mafia farmacéutica…
La mayoría de la población cree que su salud está en buenas manos. Cree a pies juntillas lo que los organismos sanitarios nos dicen acerca de las enfermedades y de las diversas formas de combatirlas. Nos han adoctrinado a creer en …
mircoles 23 de noviembre de 2011, 01:42 COT
BIO BAC:
Desmantelada una red que fabricaba remedios milagrosos
por Carlos Tellería
El pasado día 28 de octubre, tras varios meses de investigaciones, se detenía a los integrantes de una red de fabricación y distribución de dos pretendidos medicamentos, comercializados bajo las marcas “Bio-Bac” e “Inmunobiol”. Entre los detenidos, figuraban varios médicos y farmacéuticos.
El caso del “Bio-Bac” vuelve a traer a la actualidad, una vez más, el intenso comercio que existe desde hace siglos de pócimas milagrosas que pretenden curarlo todo, o casi todo. Según figura en la página web que tenía el laboratorio (clandestino, por cierto) donde se fabricaba el producto, el “Bio-Bac” servía para tratar enfermedades tales como el cáncer, la artrosis o el sida, además de ser un maravilloso tratamiento contra la gripe u otras afecciones estacionales, e incluso como prevención contra las mismas. Supuestamente, y siempre según sus creadores, el mecanismo de acción consiste en la estimulación del sistema inmunitario del enfermo mediante la ingestión de un compuesto protéico. Esencialmente se trata del conocido mecanismo de las vacunas, con la diferencia de que éstas generalmente estimulan la producción de anticuerpos, mientras que en el caso del “Bio-Bac”, lo que se estimula es la producción de uno de los tipos de linfocitos asociados al sistema inmunitario.
Leer artículo completo en http://escepticos.es/webanterior/articulos/biobac.html
mircoles 23 de noviembre de 2011, 03:15 COT
Sobre este comentario acerca del Bio-Bac… ¿de cuándo es la noticia?
Ruego lean ACTUALIZADAS las noticias e informes sobre el caso Bio Bac:http://www.dsalud.com/index.php?pagina=biobac
Ahí encontrarán toda la información hasta los últimos informes y sentencias sobre este producto.
No defiendo nada que vaya contra la Ley, simplemente me gusta aclarar, con el máximo respeto, este asunto que tantos ríos de tinta ha vertido.
Un saludo.
domingo 27 de octubre de 2013, 16:09 COT
Por favor, señor Akerman conoce usted , por casualidad algún médico o no médico que diagnóstique y cure los parásitos como tenias o toxocaras u otros.?