Tsutomu Yamaguchi, doble hibakusha
Estancias > Katherine EscobarPor: equinoXio
6 dAmerica/Bogota Enero dAmerica/Bogota 2010 17:27 COT
16 de marzo de 1916 – 4 de enero de 2010.
(Actualizado 7/1/2010) Gracias a la iniciativa de Julián Ortega, equinoXio publicó el Hibakusha Project, una serie con los testimonios de los sobrevivientes (hibakusha) de las bombas atómicas lanzadas por Estados Unidos sobre Hiroshima y Nagasaki en 1945. En varios de ellos aparece Tsutomu Yamaguchi, doble hibakusha.
Tras sobrevivir el primer ataque en Hiroshima (6 de agosto), en donde se encontraba desde hacía tres meses por su trabajo, tomó a la mañana siguiente el tren de regreso a su hogar en Nagasaki, a 300 kilómetros de distancia, con sus colegas Akira Iwanaga y Kuniyoshi Sato. Llegaron el 8 de agosto. A la mañana siguiente, aún a pesar de las heridas ardientes de la bomba atómica que había sobrevivido hacía poco más de 48 horas y recién tratadas en el hospital, fue a su trabajo.
Mientras su jefe le preguntaba que si estaba loco, que cómo podía afirmar que una sola bomba había destruido una ciudad como Hiroshima, a las 11:02, y por imposible que parezca, Yamaguchi volvió a experimentar el mismo infierno (y sobrevivió para contarlo). De aquí su condición de doble hibakusha.
En 2005, las fotografías de Jeremy Sutton-Hibbert que acompañaron el reportaje de Lloyd Parry.
También es posible verFallece un hombre que nos deja un enorme legado de paz, sabiduría y el mensaje de porqué mantener al mundo libre de armas nucleares. Era el último superviviente reconocido oficialmente de los dos bombardeos. Sato falleció en 2008 e Iwanaga vive aún en Nagasaki. Se cree que aún hay 7 dobles hibakusha más.
Invitamos a los lectores de equinoXio a leer el perfil sobre Tsutomu Yamaguchi publicado en el Mainichi Shimbun y otros artículos de la serie donde se puede repasar su pensamiento también:
- No odio a los Estados Unidos
- Compartiendo el dolor de dos bombardeos atómicos mediante la poesía
- Pasando el testigo de la paz
- “La guerra no terminará a menos que amemos a nuestro prójimo”
Paz en su tumba.