La marcha del 20 de julio en la capital del olvido
Marcha por la libertad - 20 de julio de 2008 > OpiniónPor Paola Vargas
jueves 24 de julio de 2008 3:54 COT
El símbolo es un efectivo catalizador de la acción… esa es una “obviedad” que recuerdo haber concluido de algún libro que leí fugazmente y que el argumento de ésta película expresa de modo más elocuente. En su momento, esa fue la primera explicación que se me ocurrió para entender el ánimo que movilizó al gran número de personas que vi cuando llegué a la plaza Santander el domingo 20 de julio y que seguía creciendo, ocupando cada espacio disponible hasta el punto de llegada en la plaza de Bolívar.
La presencia de una multitud tal, pese a todos los posibles factores en contra (el clima, el caos, la inseguridad, la pereza o el ocio dominguero), pone de manifiesto una actitud concertada que ésta vez se reúne, sin mayores sutilezas, bajo el lema oficial: Unidos por la libertad de TODOS los secuestrados. ¿Cuál es la diferencia con las marchas pasadas si, finalmente, el propósito es la libertad “para TODOS”?
Esta vez el ánimo de los marchantes evidenciaba el alivio en la conciencia colectiva (y del gobierno) que resultó ser el rescate de 15 personas el pasado dos de julio. Las palabras de agradecimiento y júbilo inundaban los discursos de la gente que caminaba por la séptima, y de algunos otros que se reunieron en el Parque Santander alrededor de una tarima de la Vicepresidencia de la República donde Francisco Santos Calderón recurrió al símbolo de “desatar las cadenas” a un hombre visiblemente demacrado como muestra del “anhelo de sentir a Colombia unida contra el secuestro”. “Unidos contra el secuestro…” una generalización insuficiente que excluye el desconcierto de las víctimas de otras formas de violencia cuyos verdugos no tienen nombre o se esconden detrás del disfraz de la legalidad.
Algunos de esos seres tristemente anónimos (porque no son como Íngrid y no salen en la prensa) se tomaron los micrófonos de la misma tarima donde, minutos antes, nuestro farandulero vicepresidente hizo acto de presencia. Eran hombres con cierta angustia perceptible que narraban la experiencia de ser secuestrados por ese ente maligno llamado “LAFAR” o por la “delincuencia común” (una irresponsable jerarquización de la criminalidad). Todos decían más o menos lo mismo: “Lo logramos y felicitamos a nuestro gobierno, pero no podemos olvidar a los que aún quedan en la selva”.
La “gran mancha blanca” que continuó el recorrido hacia la plaza de Bolívar estaba inundada de pluralidad. En algún momento pude notar, entre tanto ruido y tanta felicidad colectiva, una escena retórica del poder de los símbolos (de paz, anestésicos o redentores). Delante de un grupo de personas, miembros de alguna de tantas organizaciones religiosas heterodoxas que abundan en Bogotá, desfilaba una representación de la TF (Tercera Fuerza Nacional Socialista) portando pancartas con el símbolo del “orgullo blanco” y pidiendo la libertad. ¿“Libertad”? ¿Un grupo de ultraderecha con una fuerte herencia ideológica nazi pidiendo libertad? Por supuesto, porque este no era el día de confrontaciones políticas que desprestigiaran los deseos humanitarios, no era el día de las sutilezas partidistas como las del 4 de febrero. Era el día de transformar los mensajes de odio por agradecimientos y, a veces, también por un patriotismo ciego a falta de algo mejor.
Todas estas muestras de tolerancia convergieron en la plaza de Bolívar, donde los cuatro organizadores oficiales (Redepaz, País libre, Un millón de voces, Colombia soy yo) intentaban devolverles la memoria a los asistentes, leyendo algunos nombres y pidiendo su liberación. A pesar de la euforia, los familiares de los secuestrados recordaron que no están de acuerdo con un rescate militar y que el gobierno debe buscar las vías de diálogo para garantizar el regreso de personas que nunca debieron irse.
El símbolo del rescate se extingue a medida que la frustración de las víctimas y que las verdades detrás de él son descubiertas. Cuando la capitalización de acciones como estas es tan eficaz ante la opinión pública, siempre existe la posibilidad de que el escepticismo crezca debajo de la superficie del optimismo del régimen y de la prensa. Después de esta movilización, los problemas de violencia en Colombia se reducen al secuestro, los actores armados se minimizan a un grupo insurgente venido a menos y se borran de la conciencia los años que corren para los que todavía están en la selva, para los desplazados, los desaparecidos. No creo que sea probable que, algún día, alguien organice una marcha de tales magnitudes por las otras víctimas o, más utópico aún, por los excesos del estado.
jueves 24 de julio de 2008, 10:26 COT
A propósito de marchas, se han preguntado a donde van a parar los millones de pesos de las ventas de camisetas y souvenirs contra las FARC? A las AUC o las Águilas Negras, a la campaña de reelección o a los tres al mismo tiempo?
Perdonen la pregunta retórica. La respuesta es obvia.
jueves 24 de julio de 2008, 14:17 COT
La marcha tuvo todo tipo de ingredientes. En últimas considero que cada quien hizo su marcha, unos más por respaldar a Uribe que porque le interesan los secuestrados, otros para exigirle a Uribe una salida negociada al conflicto, unos pidiendo intercambio humanitario y otros pidiendo que en caso de ser secuestrados sean rescatados militarmente así mueran en el operativo. También representantes de unos y otros aprovecharon la marcha para obtener beneficios políticos y cosas así. A pesar de todo esto considero valioso que se den este tipo de manifestaciones y que se llegue el momento en que no se den después de casi un mes de publicidad sino que sean respuestas inmediatas y que aparte del secuestro comiencen a hacerse visibles los otros males del país. Saludos.
viernes 25 de julio de 2008, 00:06 COT
Bueno ante cualquier cosa la marcha tubo bastante importancia para el camino que todos queremos hacia la paz.
Lo que queria dejarle claro es sobre la critica que en si me parece muy particular que hicieron sobre una organizacion tan prestigiosa como es TERCERA FUERZA, por la simple razon que no es una organizacion de “ultraderecha” como usted se dio el privilegio de llamar, pues siendo este un medio investigativo y periodistico se nota que no profundisaron ni en lo mas minimo sus comentarios; tercera fuerza es un grupo de jovenes que adoptamos un ideal nacionalsocilista y no somos “ni derechas, ni izquierdas, somos una tercera y nueva alternativa le agradeceria evitar comentarios que puedan insultar o por debajear una organizacion como esta.
Gracias
viernes 25 de julio de 2008, 10:55 COT
Creo que el Edwin tiene razón. Son dos cosas que se deben diferenciar y no se pueden confundir. Y creo que lo de “ultraderecha” si es bastante fuerte para una organización que, aunque adopta doctrinas nacionalsocialistas, no necesariamente están actuando en pro de un estado de ultraderecha como se presume en el documento. Todos somos libres de expresarnos de alguna forma y el limitarlo en los documentos o restringirnos a nosotros mismos, sea la doctrina que sea, atenta contra nuestra búsqueda de la libertad de expresión. Un saludo.
viernes 25 de julio de 2008, 11:13 COT
Edwin, Alejandro:
La marcha fue un concepto que intento reunir la mayor cantidad de disidencias, ideologías y posiciones políticas posibles en pro de un “anhelo” humanitario. Pero como me propuse decir en el artículo, la marcha no tiene ninguna garantia más allá de un convencimiento ficticio. Las personas que salieron a marchar (con buena o mala fe) aceptan tácitamente la reducción del problema de violencia a ciertos actores y a ciertas víctimas. En últimas, es un poco de doble moral.
Ahora, El nacional-socialismo tiene un innegable peso histórico del que se alimentan los jóvenes de TF. Y aunque en apariencia asuman una posición “alternativa” ante las tradicionales fuerzas políticas, la manera de actuar de los miembros que portan esas banderas son claramente violentas y ultraderechistas. Lo sé, porque he estado muy cerca de las dinámicas de dominio territorial que grupos como TF, SHARP Y HARP tienen en la ciudad (Bogotá), de la violencia contra ciertas personas y ciertos grupos. Insisto, es un problema de doble moral, porque en la marcha “todos éramos buenos” bajo símbolos redentores que poco o nada muestran de la realidad. TF fue un ejemplo de eso mismo.
Si la “prestigiosa” organización TF quiere asumir una posición seria, debería ser consecuente (activa y pasivamente) con el lema que están “defendiendo”. ¿Falta de control interno? No lo sé.
viernes 25 de julio de 2008, 11:49 COT
* Corrección: “TF, SHARP, RASH…”
domingo 27 de julio de 2008, 22:00 COT
bueno la marcha vajo la se presento TERCERA FUERZA es una exprecion de rechaso ala violencia de izquierda simplemente significa que lo nsotros somos jovenes q
domingo 27 de julio de 2008, 22:02 COT
Periodista Paola Vargas, me parece una irresponsabilidad de su parte que no mantenga su imparcialidad en las noticias, es su deber informar, siempre manteniendose neutral, y no sesgando la informacion a su parecer. por otro lado, me parece que si no conoce de un tema no deberia lanzar unas especulaciones de tan “modo groso”, pues es obvio que no conoce la escencia del nacional socialismo, y hablar de forma tan imprudente acerca de la postura politica de TF es practicamente imprdonable para una periodista, pues nisiquiera se tomo el trabajo de contactar al grupo y conocer sus metas, su postura, sus politicas, y demas; es completamente anti etico su forma de proceder, y creo que la intencion era difamar el movimiento nacional socialista, satirisando a TF para continuar con la estigmatizacion de la que ha venido siendo victima. Me parece que su comentario acerca de la “libertad”, hace apologia a la politica del prejucio, y no genera un espiritu de investigacion entre las personas que tengan contacto con su noticia, pues forma una barrera entre las personas del comun y la verdad.
Le solicito sea mas prudente a la hora de dar una informacion noticiera, obviamente su labor debe estar marcada por la necesidad de informan manteniendo una postura imparcial.
lunes 28 de julio de 2008, 23:04 COT
LA VERDAD ES UNA: LA PERIODISTA ES DE IZQUIERDA, PAZ, HABLA DE PAZ, CUAL PAZ. LA QUE EXIGIMOS TODOS COLOMBIANOS O LA QUE NOS PROPONEN SUS PROTEGIDOS POR ESTE ARTICULO LOS CHUSMEROS DE LAS farc, NO NIÑA ASI NO SON LAS COSAS SI LOS COLOMBIANOS NOS QUEDAMOS CON LOS BRAZOS CRUZADOS EL SUCIO Y ASQUEROSO COMUNISMO SE TOMARA EL PODER Y SI ES NECESARIO UTILIZAREMOS TODOS LOS MEDIOS POSIBLES PARA EVITAR ESTA TRAGEDIA NACIONAL.
martes 29 de julio de 2008, 04:34 COT
Supongo que ya tienen preparada la marcha paramilitar del 7 de agosto para recoger mas firmas para la extension de la narcodictadura.
martes 29 de julio de 2008, 22:10 COT
Lo que faltaba: “nazis de centro”. Están igual que cuando hace unos meses izquierdistas como Petro y Lucho salieron diciendo, junto a Mockus y Fajardo, que “la vía es el centro” en El Espectador.
¿Qué entenderá el señor Gómez por “imparcialidad”? ¿Reproducir al pie de la letra la propaganda de un grupo que usa símbolos de ultraderecha, cita en su propaganda célebres “figuras” de la ultraderecha, cuyos miembros (algunos) se visten como nazis, gritan Sieg Heil! (frase prohibida en Alemania desde el final de la Segunda Guerra Mundial), se proclaman “nacional socialistas” [como Hitler] y “herederos” de un grupúsculo homónimo liderado por el dictador Gustavo Rojas Pinilla, y que no son más que la manifestación local de la llamada “Third Position” (un neofascismo remozado, una mescolanza de extremismos), pero aun así abominan que les digan “de ultraderecha”?
Si se hubiera tomado la molestia de leer detenidamente desde el comienzo, se habría dado cuenta de que este es un artículo de “opinión” y de que lo máximo que le podemos pedir a su autor o autora es honestidad. La autora ha aclarado que se ha basado en su propia experiencia. Quizás Gómez y los demás comentaristas que afirman ser miembros de TF no se comporten así, pero si la autora ha tenido que lidiar con extremistas vinculados a su grupo que exhiben esos comportamientos, es indudable que debe haber alguna “falla”. Si les importa tanto la “imagen” de su grupo, deberían “instruir” o “prevenir” más a sus miembros. Aquí no hay nada de sátira ni de prejuicio.
Por otro lado, tampoco veo en ningún aparte del escrito que se “proteja” a los terroristas de las FARC. Ahora resulta que si no se insulta con mínimo diez groserías a esta organización entonces se es “guerrillero”. El comunismo no se va a tomar el poder, pensamos muchos que sí estamos en 2008, no como algunos trasnochados de ambos extremos del espectro político que todavía viven en un mundo bipolar con los alambres de púas rodeando el muro de Berlín y las banderas soviéticas ondeando en la Plaza Roja de Moscú. ¿”Usar todos los medios” no equivale al “emplear todas las formas de lucha” característico de los terroristas y de sus justificadores? ¿Esa es la actitud de una persona que habla de “la paz que exigimos todos los colombianos”?
Un saludo.
sbado 2 de agosto de 2008, 00:32 COT
me parece increible que aun existan personas que no entiendan la labor social que el nacional socialismo lleva en su escencia, y que si al final de la segunda guerra mundial se prohibio el saludo honroso de un ns, es porque la urss, obviamente como comunista y usa, como capitalista lo prohibian para mantener el control social y economico de su nueva conquista, y no porque los alemanes asi lo quieran. La grandeza que logro alemania con el nacional socialismo es tan inegable, que sus propios enemigos ven la necesidad de inventar historias como el holocauto judio para distraer a la critica del transfondo del movimiento. cuando me referia a imparcialidad, utilizo el termino esperando que la periodista, asi sea un articulo de opinion, no sesgue la vision del movimiento, pues esto incapacita a los ns para poder mostrarse ante la sociedad que es hacia quienes vamos dirigidos, cuando hace apologia al escarnio del movimiento, asegurando que este no busca la paz, y comentando como poco racional, aunque no uso estas palabras, el echo que acompanaramos a colombia en esta marcha de repulsion a los rojos, que a mi parecer serian los unicos que sobrarian en una marcha de un pais tan azotado por la escoria comunista. No ser imparcial es, indiscutiblemente, haber averiguado claramente los fines, los planes de trabajo, la estructura y demas aspectos relevantes del movimiento, con alguno de sus lideres, pero asi digan que las fuentes son fiables y demas, es obvio que jamas a interactuado con un tf. Periodista, que falta de vision, su articulo hubiese sido mas completo, y por tanto mas profesional y llamativo, si antes de juzgar algo de lo cual solo a escuchado hablar a sus detractores, averigua la otra cara de la moneda, y sencillamente deja que sean sus respetados lectores quienes decidan que postura tomar, sin su colaboracion, pues la verdad me parece que dejo en entre dicho su capacidad de abarcar una noticia, asi sea de opinion; y a criterio de la mayoria, por no decir que de todos, los que conocemos la verdadera escencia del ns, usted se ve como una roja, cuya unica labor es no permitirle a los ciudadanos que analicen nuestra propuesta social, como si compajinara con las atrocidades que cometen los credos anarquistas y comunistas tanto de las farc como del eln y las otras guerrillas en ebullision.
no siendo mas, me despido aconsejandole que intente entrevistar a lideres del grupo, que tome en cuenta nuestras opiniones, y despues a su criterio decida si escribir retractandose de las atrociadaes que dijo sobre el nacional socialismo. aaaahhhhh, y el nacional socialismo es tan centro, que la critica europea, no la gringa, a tenido enormes dificultades para catalogarlo izquierda o derecha, pues se encuentran, desde que el fuhrer tomo el poder, diferentes visiones, unos que aseguran que es ultra izquierda, y la otra, de la cual hace parte inglaterra, por tanto usa, y como ovejas latinoamerica, que lo acunan en la ultraderecha. los nacional socialistas preferimos catalogarnos, nacionalistas y proletarios.
sieg heil
mircoles 6 de agosto de 2008, 17:44 COT
Jeje, me divierte mucho la diatriba del señor Gómez. No solamente porque él y su grupo de “nazis de centro” utilizan la terminología de la guerra fría (“rojos”), dándome la razón, sino porque terminan comportándose como esos “rojos” del Partido Comunista Chino, pidiendo “imparcialidad” a los medios que cubren las Olimpiadas. Es claro que para el PCCh “imparcialidad” equivale a repetir su propaganda, igual que para TF.
Y lo de negar el Holocausto es tan, pero tan trillado… supongo que no sabe que el año pasado la Asamblea General de las Naciones Unidas (claro, “judías”, qué “argumento” de pacotilla el que me espera) aprobó por unanimidad la resolución 61/255 que condena sin reserva alguna cualquier negación del Holocausto. ¡Y lo peor es que muchos de esos “rojos”, como Noam Chomsky, se han opuesto a las leyes que consideran la negación del Holocausto como un delito porque defienden la libertad de expresión necesaria para que grupúsculos como TF existan! ¡Países con gobiernos “rojos” como España despenalizaron la negación del Holocausto recientemente! ¡Mahmud Ahmadineyad, amigo íntimo de “rojo” Hugo Chávez, es uno de los más célebres negacionistas! ¡Los extremos se unen! ¡Qué malos son esos “rojos”! Perdón, ¿de qué color es la bandera nazi?
Hasta se contradicen con su propia propaganda, cuando afirman que “declaramos de forma expresa y rotunda que “Tercera Fuerza” condena sin paliativos la violencia gratuita y la incitación al odio racial, así como la apología de cualquier actuación contra los derechos humanos, ayer, hoy o en el futuro. Del mismo modo, declaramos que en ningún momento pretendemos ir contra colectivo étnico o religioso alguno, por el contrario, es nuestra meta la concordia y la paz entre los pueblos, las razas y culturas, dentro del respeto a la identidad, libertad y dignidad de los mismos, en un mundo más justo, solidario y natural”. Por lo visto, la aparente “tolerancia” es puro disfraz.
Ni a mí ni a los lectores de equinoXio engaña el señor Gómez. Independientemente de la presuntamente ambigua posición en el espectro político, el atraso de 80 años y lo peligrosamente ridículo que resulta añorar a un terrorista como Adolfo Hitler (y toda su cohorte de asesinos) son suficiente razón para el ostracismo de TF. Igual que el “rojo” Hugo Chávez, su grupo no necesita más que las acciones de algunos de sus propios miembros para desprestigiarse. Se arma una discusión de este calibre por una mención marginal en un artículo sobre la marcha del 20 de julio contra el secuestro, que registramos entre otras cosas porque condenamos las acciones y a los criminales de las FARC, el ELN y demás delincuentes que los perpetran. De igual manera debe condenarse cualquier apología al crimen y al terrorismo, venga de donde venga, incluso del “centro”.
Un saludo.
viernes 8 de agosto de 2008, 16:53 COT
Los nazis criollos son de tal pobreza mental que copian hasta los saludos y el lenguaje de sitios que no conocen. Es hasta de cierto interés leer a Ledesma Ramos, pero a un payaso que remeda la ridiculez hitleriana no le tengo respeto.
mircoles 2 de marzo de 2011, 07:30 COT
PARA SIMPLEMENTE TODOS LOS DE TF SON UNA PARTIDA DE IGNORANTES….PIENSAN EN LLEVAR UNA PENSAMIENTO ABSOLUTAMENTE ESTUPIDO..SINCERAMENTE USTEDES SON Y SERAN SIEMPRE UNA MANADA DE HP!! SALUD Y LARGA VIDA!!